Descartan víctimas guerrerenses por incendios en Los Ángeles
CHILPANCINGO, Gro., 14 de febrero de 2014.- El dirigente de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), Bruno Plácido Valerio desmintió las acusaciones del reportero y trabajador del ayuntamiento de Chilpancingo, José Alberto Morales Sánchez.
La jornada del jueves, Morales Sánchez denunció que un grupo de Policías Ciudadanos de la UPOEG ingresaron a su domicilio y amedrentaron a su madre con las armas.
De acuerdo al reportero y trabajador del ayuntamiento de Chilpancingo, los policías ciudadanos allanaron su casa para detenerlo, supuestamente por una nota y una columna de opinión que publicó un día antes en los periódicos locales ADN y Expresión Popular.
En la columna se leía de manera textual: “Los policías de la UPOEG han estado deteniendo a gente que se ha dedicado a laborar dentro del marco de la legalidad, principalmente a los que trabajan el campo. Y es que los desalmados policías comunitarios no han respetado ni a las mujeres, ya que en Cajeles han golpeado a varias féminas y a jóvenes ajenos a la delincuencia organizada. Los vecinos de esa localidad que injustamente han sido detenidos por los miembros de las autodefensas, han denunciado que los torturan con la denominada “chicharra” en los genitales –un aparato que transmite toques eléctricos-, los golpean en diferentes partes del cuerpo e introducen su cabeza en un bote de agua; todo con el fin de hacerlos hablar de algo que desconocen”.
Sin embargo, Morales Sánchez no especificó la fuente de la que obtuvo la información, tampoco aportó evidencia gráfica, documental ni testimonial.
En entrevista, reconoció que no había visto a los detenidos para corroborar que efectivamente presentaban huellas de tortura.
Desde el ingreso de la UPOEG al valle del Ocotito el 23 de enero, visitadores de la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos (Coddehum) y de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) verifican constantemente el estado de los detenidos por la Policía Ciudadana, para constatar que no sufren de tortura ni se violan sus garantías.
Aún así, Morales Sánchez escribió una nota y una columna en la que acusó a la UPOEG de torturar a los detenidos, sin confirmar la información ni respaldar la denuncia con evidencia fotográfica, documental ni testimonial.
Cuestionado al respecto el dirigente de la UPOEG, Bruno Plácido Valerio desmintió todas las acusaciones del trabajador del ayuntamiento.
Explicó que un grupo de policías ciudadanos acudió a su domicilio, en el poblado de Cajeles, para solicitar su colaboración en las investigaciones que realiza la UPOEG.
Recordó que un hermano de José Alberto Morales Sánchez fue asesinado, por lo que solicitaron su declaración para integrar las investigaciones de personas ejecutadas y desaparecidas del Valle del Ocotito.
“No estamos persiguiendo al reportero, fueron a pedirle su colaboración con información y no es obligatorio que comparezca si no lo desea, eso es todo lo que ocurrió, a mi me pasaron el reporte los compañeros”, explicó Plácido Valerio, en entrevista exclusiva con Quadratín Guerrero.
Respecto a las acusaciones de Morales Sánchez, quien denunció en redes sociales a los policías ciudadanos de torturar a los detenidos, el dirigente de la UPOEG recordó que la Coddehum realiza visitas permanentes para constatar que esto no ocurra.
“Los policías no fueron a detener al reportero por lo que escribió, hay notas que han sacado de nosotros que no están investigadas, que no tienen elementos, que es sólo la opinión de quien escribe y no por eso los andamos persiguiendo”, aclaró.
Subrayó que, además de tomar la declaración de Morales Sánchez por su hermano asesinado, también lo buscaron para solicitarle información sobre el dueño de los terrenos ubicados en el cerro detrás de su casa, ya que ahí se encontraron escondites de armamento.
Reiteró: “Nuestra intención es llamarlo porque mataron a un hermano de él y nosotros estamos haciendo una lista de varios desaparecidos y muertos, para saber el por qué los desaparecieron y armar la ruta de investigación”.
Plácido Valerio invitó al reportero y trabajador del Ayuntamiento, José Alberto Morales Sánchez a participar en una asamblea popular en Cajeles, para que sustente sus acusaciones contra la UPOEG por la supuesta tortura de detenidos.
“Que señale quién le informó, quienes son los torturados y quién de los policías lo amenazó a él o a su madre, para que nosotros tomemos medidas, porque si tiene pruebas nosotros estamos obligados a destituir o sancionar a los elementos que han actuado mal”, exigió.
El dirigente de la UPOEG agregó: “Cuando uno dice algo es porque está dispuesto a sostenerlo y a probarlo, nosotros hicimos una asamblea pública ayer a las ocho de la noche en Cajeles y ya se aclaró con la gente del pueblo, pero si él quiere lo volvemos a ratificar, que se presente, que señale a quién, que nos diga nuestros errores para poner orden”.