Minimiza Rubén Figueroa agresiones durante desfile

ACAPULCO, Gro, a 01 de mayo de 2014.- En su huida tras los actos vandálicos protagonizados por normalistas de Ayotzinapa, que le gritaron “asesino y Aguas Blancas no se olvida”, el ex gobernador de Guerrero, Rubén Figueroa Alcocer, consideró prudente la intervención de la administración estatal para dar por terminado el paro de los más de mil 600 policías de Acapulco.
Caminando lo más rápido que podía y con su equipo de seguridad y seguido de algunos priístas, Figueroa Alcocer lamentó que “un buen desfile de los trabajadores termina en medio de insultos para todos los funcionarios” asistentes a la conmemoración del 101 aniversario del Día del Trabajo.
¿Se echó a perder el desfile?
-Pienso que sí, porque llegaron a la violencia, no hay problema, hay que tener paciencia y ya”.
El político priista estimó que el paro de los policías es un problema laboral que debe resolverse dentro del marco de la ley y buscar una solución pacífica.