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TLAPA, Gro., 23 de junio de 2014.- Una joven embarazada se duele afuera del Hospital General de Tlapa, come un huevo crudo, a cierta distancia se oyen un par de recetas que le comenta una señora para que se alivie más rápido, la mujer de 18 años entró al hospital porque lleva tres días con dolores, sin embargo solo le dijeron que caminara y caminara quizá, porque por la mañana no hay ginecólogo que atienda en el nosocomio.
La chica también fue atendida anteriormente por una partera de nombre Noemí, pero en esta ocasión acudió con el personal médico ya que la fecha para aliviarse estaba calculada para el 15 de junio.
Familiares de la joven y de su pareja dialogaron con incertidumbre en el patio del hospital ante la faltar de certeza médica, “pero si luego dicen que les pueden dar una inyección para que se alivie, ¿te preguntaron si querías cesárea? no, -respondió la joven convaleciente- ¿es que no le hacen caso qué podemos hacer?” comentó el grupo de mujeres que decidió acudir al Hospital de la Madre y el Niño Indígena guerrerense para ver si ahí la podían atender.
En la pasada gira del gobernador, la jefa de enfermeras del Hospital General de Tlapa, solicitó al secretario de salud, Lázaro Mazón, 30 enfermeras para atender las necesidades del hospital cuyas instalaciones, así como el personal, son insuficientes para atender la demanda regional que llega al hospital.
Del banco de sangre que, según un diario local, ya había sido instalado por la diputada, Luisa Ayala Mondragón en el hospital de la madre en Tlapa, el secretario aseguró que pronto podría estar listo.