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CHILPANCINGO, Gro., 21 de agosto de 2014.- Un centenar de estudiantes del poblado Renacimiento de Agua Hernández corren el riesgo de perder el ciclo escolar, porque el ayuntamiento de Chilpancingo no entregó a la Secretaría de Educación Guerrero (SEG) el dictamen para avalar el nuevo asentamiento poblacional.
En septiembre de 2013, el Río Chiquito se desbordó a causa de las lluvias torrenciales que provocó la tormenta tropical Manuel; el río cambió su cauce y se llevó unas 50 viviendas, así como la escuela de Agua Hernández.
Ante el riesgo que representa una nueva crecida del río, los habitantes abandonaron el pueblo y se asentaron en otro punto más seguro, al que nombraron Renacimiento de Agua Hernández.
En conferencia de prensa, el comisario Ramón Ramos Martínez indicó que hay 20 alumnos de preescolar, 52 de primaria y 19 de secundaria que no tienen acceso a la educación.
Explicó que el ayuntamiento no entregó a la SEG el dictamen en el que da constancia del nuevo asentamiento poblacional.
Este dictamen es necesario mientras el ayuntamiento no entregue el plano legalizado de la comunidad, en el que se indiquen las áreas en donación para la construcción de escuelas, casa de salud y comisaría.
“Ya inició el nuevo ciclo escolar, a nosotros nos prometieron que nuestros niños tendrían acceso a la educación, pero a la fecha no tenemos respuesta de nada. El lunes nos quedamos esperando los maestros y no llegaron”, reprochó el comisario.
Los padres de familia acudieron a la SEG para preguntar el motivo por el que no llegaron los maestros y les respondieron que mientras el ayuntamiento no entregue el dictamen de nueva comunidad, no pueden otorgarles el servicio educativo.
“Es una total apatía por parte del ayuntamiento, ¿qué destino le depara a esos niños?, el ayuntamiento debe ser sancionado por negarles el derecho a la educación”, expresó Ramos Martínez.