Procesan a dirigente y representante de partido México Avanza en Guerrero
CHILPANCINGO, Gro., 19 de febrero de 2015.- El abogado del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, Vidulfo Rosales Sierra, aseguró que el deslinde de El Carrete de los hechos de Ayotzinapa demuestra el grado de criminalidad del Estado Mexicano y la poca credibilidad que tienen las investigaciones realizadas por la Procuraduría General de la República (PGR).
Ayer Santiago Mazari Hernández, alias El Carrete, presunto operador del grupo delictivo Los Rojos, se deslindó en varias mantas del ataque que sufrieron los estudiantes de Ayotzinapa la noche del 26 de septiembre en Iguala, hecho que dejó un saldo de 6 personas asesinadas y 43 normalistas desaparecidos.
Para el abogado Rosales Sierra, quien representa a los padres de los desaparecidos, el deslinde de El Carrete deja en evidencia la poca credibilidad que tiene la investigación realizada por la PGR en torno al caso.
Dicha investigación se basa, casi en su totalidad, en las declaraciones ministeriales realizadas por Felipe Rodríguez Salgado, alias El Cepillo, jefe de sicarios de Guerreros Unidos en Iguala, ya que fue precisamente él quien incriminó a El Carrete.
“No existen elementos de prueba contundentes en la averiguación previa que indiquen que hay un vínculo entre los normalistas y la delincuencia organizada. Que un propio miembro de la delincuencia esté refutando la investigación de la PGR de una manera tan clara y contundente es una prueba más de que éstas no tienen sustento y que las declaraciones de El Cepillo son falsas”, expresó el abogado.
Sostuvo que el Estado utilizó a El Cepillo para criminalizar a los estudiantes y a la escuela normal rural, de tal manera que se les niegue el acceso a la justicia.
“El deslinde de El Carrete muestra la relación, el vínculo de las autoridades con la delincuencia. Ellos tratan de ocultar ciertas cosas, se vislumbran ciertos pactos de la delincuencia con la autoridad, al grado que la propia delincuencia los acusa de tratar de obstaculizar que se saque a la luz la realidad”, subrayó Rosales Sierra.
En las mantas que aparecieron ayer en Morelos, El Carrete asegura que está dispuesto a “hablar con cada uno de los padres (…) para quitarles la venda de los ojos y que conozcan la verdad”.
Al respecto, el defensor dijo que serían los propios padres de familia quienes pudieran tomar la decisión de reunirse con el líder del grupo delincuencial, previa verificación de la autenticidad de las mantas.
“Eso lo determinarían los padres, si se reúnen con él, si estarían dispuestos a abrir un diálogo con una persona así”, indicó.