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ACAPULCO, Gro., 6 de octubre de 2015.- Debido a la expectativa de que el gobierno federal mantendrá apoyo financiero suficiente para Guerrero -que el próximo 27 de octubre tendrá una alternancia de gobierno del PRD a uno del PRI- Standard & Poor´s mejoró la perspectiva que tenía sobre el estado de negativa a estable y confirmó su calificación de riesgo crediticio en mxBBB+ en escala nacional.
Este martes la calificadora de crédito dio a conocer que la revisión de la perspectiva a estable de negativa “refleja nuestra expectativa de que el gobierno federal mantendría apoyo financiero suficiente para Guerrero”, por lo que estima que el desempeño presupuestal sería balanceado en 2015 y 2016.
Reitera que “nuestro escenario base estima que el estado recibirá apoyo suficiente y oportuno de parte del gobierno federal, por lo tanto no esperamos que se deterioren sus indicadores financieros durante los próximos dos años. De tal manera, esperamos que los déficits después de gasto de inversión no superen 5 por ciento de los ingresos totales durante 2015 y 2016, y que para el mismo periodo, su deuda continúe siendo baja”.
El reporte disponible en su página de Internet advierte que podría bajar la calificación si se reportan déficits después de gasto de inversión que superen consistentemente 5 por ciento de los ingresos totales, y se elevaría si Guerrero fortalece sus prácticas administrativas, incluyendo la implementación de mejores controles de gasto, un mayor nivel de ingresos propios, además de abordar las deficiencias en el sistema de pensiones dentro de los siguientes dos a tres años.
También señala que la calificación está limitada por la evaluación de su economía como ‘muy débil’, que se compara muy por debajo del promedio nacional, y por su ‘muy débil’ flexibilidad presupuestal que se refleja en el bajo nivel de ingresos propios y altas necesidades de gasto.
Considera además que la administración financiera es ‘débil’, que los niveles de transparencia son bajos, las instituciones estatales vulnerables y la liquidez ‘menos que adecuada’, aunque la ausencia de deuda de corto plazo mitiga los riesgos de incumplimiento.
Abunda finalmente que al 30 de junio de 2015, “el efectivo del estado sumaba 4 mil 600 millones (de pesos), que es casi el doble de sus cuentas por pagar por 2 mil 800 millones”, diferencia que espera se acorte al finalizar el año.