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ACAPULCO, Gro., 15 de junio de 2016.-El cuerpo de Adelaida Landín Ortiz llegó a su última morada en el panteón de El Cayaco, luego de más de dos años de muerta.
Falleció el 24 de abril de 2014 y permaneció en las instalaciones de Crematorio del Pacifico sin que sus familiares supieran que las cenizas que recibieron no eran de ella.
Se enteraron cuando la Policía Ministerial descubrió el 6 de febrero de 2015, luego de las denuncias de vecinos del crematorio ubicado en la carretera Cayaco-Puerto Marqués que se quejaban de los olores, 61 cuerpos en descomposición en el interior del negocio.
El cuerpo de Adelaida fue llevado al Servicio Médico Forense (Semefo) de Acapulco, donde estuvo ahora por un año y cuatro meses junto con otros 34 cuerpos que aún restan de ser reconocidos y entregados a sus familiares.
Marisela Partida Villareal, una de las personas que acusan al establecimiento de haberlas defraudado al entregarles cenizas que no eran de sus familiares, dijo que el cuerpo debió haberse entregado desde octubre del año pasado.
Ella habla a nombre de la nieta de Adelaida quien pidió reservar su nombre, y señala que la Fiscalía de Guerrero retardó la entrega del cuerpo desde el mes de octubre del año pasado al fracasar un intento de negociación del empresario Guillermo Estua Zardain, propietario del establecimiento.
“No les daban los papeles para poderla enterrar, originalmente se iba a hacer un trato con la funeraria, iba a dar el dinero a cambio de que se le otorgará el perdón, la señora se negó”.
La Fiscalía, agregó, “había estado mandando a cremar todos los cuerpos, pero nos dijeron que ya no podían porque no había presupuesto”.
El pasado mes de enero se organizaron y consiguieron una tumba prestada para sepultar a la señora, “nos donaron un espacio en el ejido del Cayaco” por el cual el comisario pidió mil pesos para abrirla y un bulto de cemento, para lo cual los dolientes consiguieron donaciones.
“Se juntó el dinero”, pero no terminó ahí. “Fue estar dando vueltas en el MP (Ministerio Público) de El Coloso para que nos entregaran los papales para poder enterrarla”.
Fue hasta hoy miércoles que el cuerpo de Adelaida pudo sepultarse, no sin que antes sus familiares vivieran hoy miércoles un último viacrucis debido a que la funeraria Salgado que entregó el féretro donado por el DIF municipal se negó a trasladarlo al Semefo como se les había prometido y lo dejara sobre la banqueta, por lo que tuvieron que conseguir una camioneta de mudanzas que llevara el ataúd.
Una vez entregado el cuerpo, una camioneta del Semefo trasladó el ataúd al cementerio del Cayaco, donde tuvieron que esperar a negociar con el comisario que les pidió pagar mil pesos adicionales a una cantidad similar que se había acordado anteriormente para realizar el sepelio, no obstante tenían ya un acuerdo de que el lote se les daría en donación.
Sobre el caso de Cremaciones del Pacifico los dolientes siguen en proceso penal para el cual Guillermo Estua Zerdain, cuyo abogado era el actual fiscal Xavier Olea Peláez, cuenta con dos amparos.
También con el proceso de identificación que no ha podido concluir debido a que la Fiscalía les ha dicho que no cuenta con recursos para realizar las pruebas de cromosoma X.