El agua, un derecho del pueblo
Acapulco, ciudad del relumbrón
Los slogans publicitarios que algunos gobernantes escogen para realizar acciones de relumbrón resultan ofensivos para los ciudadanos.
En Acapulco donde las colonias y barrios se encuentran en penumbras y abundan las veladoras indicando los lugares donde han caído personas asesinadas en esta crisis de violencia que el gobierno ha sido incapaz de contener, al alcalde Evodio Velázquez Aguirre se le ocurre llamarle “Ciudad Luz”.
Aparte del plagio que representa, ya que es sobradamente conocido en el mundo turístico que así es conocida Paris, la capital de Francia, resulta un chiste que se crea que la gente va a escoger un destino turístico solamente porque sus hoteles estén iluminados con unos reflectores de colores, que mejor habría que colocárselos a los lugares icónicos como La Quebrada o la Cruz de Trouyet.
Mejor aún, invertir en reparar el alumbrado público que en muchas colonias, barrios y comunidades es prácticamente inexistente.
Resulta una incongruencia que una “Ciudad Luz” tenga sus calles a oscuras, mientras su gobierno se jacta de iluminar hoteles y para colmo, se pone a reabrir calles recién pavimentadas en el zócalo cuando hay infinidad de calles sin pavimentar y socavones sin rellenar en las colonias del puerto.
Alguien debe decirle al presidente Evodio que Acapulco necesita obras de verdad y no de relumbrón.
*Quebrada es una columna realizada con aportaciones de los reporteros de Quadratín, previamente verificadas.