Reforma judicial deja sin protección a periodistas: Jan Albert Hootsen
ACAPULCO, Gro., 14 de septiembre de 2017.- En reuniones llevadas a cabo en la Octava Región Naval con autoridades militares y de la marina, el gobernador Héctor Astudillo Flores desde las primeras horas de ayer estuvo atento a lo que podía pasar con la llegada del huracán “Max”, tras convertirse en una amenaza para el territorio guerrerense.
De acuerdo con un boletín, el mandatario encabezó dos reuniones con el Comité de Protección Civil del Estado, misma que vigiló el comportamiento del fenómeno natural.
En el primer reporte, Astudillo Flores informó sólo cortes de energía eléctrica en algunas zonas, árboles caídos y derrumbes que ya habían sido atendidos.
Acompañado por secretarios del gabinete estatal, así como de autoridades de los tres órdenes de gobierno, el gobernador explicó que los cauces de los ríos Papagayo y Sabana, se encontraban en un nivel normal y no representan peligro.
En Acapulco, hubo caída de árboles, derrumbes pequeños en la avenida Escénica y cortes en el suministro de energía eléctrica. Asimismo, el Aeropuerto Internacional, cerró sus operaciones sólo por unos minutos, esto por falta de electricidad.
En tanto que en Chilpancingo, se presentó lluvia ligera durante la noche, además informó que se mantuvo constante comunicación con los alcaldes de los municipios para conocer la situación que se presenta en las diferentes comunidades.
Posteriormente el gobernador se trasladado a Barra Vieja para constatar la apertura de la barra a fin de evitar inundaciones
Por la tarde el huracán Max se encontraba en la región Costa Chica, particularmente de los municipios de San Marcos, Marquelia, Copala, Azoyú, Igualapa, Cuajinicuilapa, la parte alta de Ometepec, así como Xochistlahuaca y Tlacoachistlahuaca
En la segunda reunión de evaluación el mandatario estatal enfatizó que aunque este fenómeno ya no se encuentra sobre Acapulco y ha disminuido el riesgo, no se bajará la guardia. De acuerdo a los informes, en las próximas horas mejorarán las condiciones del clima en el puerto.
Como medida preventiva se mantiene la suspensión de clases en las regiones de Acapulco-Coyuca, Costa Chica y La Montaña.
Derivado de la lluvia de las últimas horas, los sistemas de abastecimiento de agua potable Papagayo y Lomas de Chapultepec, se encuentran sin energía, por lo que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) ya se encuentra trabajando, para restablecer lo más pronto el servicio.
Se mantiene vigilancia sobre la crecida de los ríos, particularmente de Santa Catarina, ubicado cerca de Cuajinicuilapa, el cual pudiera representar un riesgo debido a la carga de agua que conlleva.
Como medida preventiva, 191 personas fueron trasladadas a refugios temporales, están listos 242 comedores comunitarios y se cuenta con la colaboración de instancias como la Secretaría de la Defensa Nacional, que ha dispuesto a más de mil 200 elementos y 43 vehículos para la fase preventiva del Plan DN III, en tanto que la Secretaría de Marina envío vehículos para apoyar las tareas.