Toman receso diputados de Guerrero hasta el 14 de enero de 2025
ACAPULCO, Gro., 11 de julio de 2019.- La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) afirmó que el trabajo conjunto y la responsabilidad compartida, son la única respuesta efectiva para enfrentar la violencia, inseguridad, falta de acceso real a la justicia, ignorancia y exclusión.
Durante la mesa de diálogo Construyendo Territorios de Paz, Derechos Humanos y Desarrollo Sustentable en Guerrero, con la organización de la sociedad civil Guerrero es Primero, el ombudsman nacional Luis Raúl González Pérez enfatizó que en México no sólo se requiere pacificar sino desarrollar una cultura de paz, lo cual demanda institucionalidad fuerte, vigencia del Estado de Derecho y una estructura burocrática profesional y eficiente.
Insistió que en la solución de problemas como la impunidad, corrupción, violencia o inseguridad, la responsabilidad básica corresponde a las autoridades, pero matizó que la sociedad tiene mucho que aportar y puede incidir positivamente, “para lo que se requiere generar una nueva forma de ciudadanía y sociabilidad”.
Ante la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero; los alcaldes de Acapulco y Coyuca de Benítez, Adela Román Ocampo y Alberto de los Santos Díaz, respectivamente; el sacerdote Jesús Mendoza; el director General del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Diego Prieto Hernández; el secretario técnico de Guerrero es Primero, Enrique Pasta Muñúzuri; y la representante del gobierno estatal, Violeta Parra, entre otros, González Pérez precisó que como ciudadanos debemos contribuir y cumplir con nuestras obligaciones, ya que cuando cada quien las cumple, sirve al bien común y al interés de la sociedad.
Por su parte, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, aseguró que para reconstruir el tejido social en México es necesario alcanzar por consenso un nuevo pacto social para generar mejor convivencia social y que incluya a quienes tradicionalmente han sido excluidos. También hizo un llamado a dejar atrás el encono y la discordia y proceder a la reconciliación.
Sostuvo que estas mesas de diálogo sobre Guerrero constituyen un espacio para construir espacios seguros para todos y en favor de los derechos humanos, una vida digna y en paz a la población de esa entidad, que parten del reconocimiento de la desigualdad, impunidad, violencia y corrupción de la autoridad, que han erosionado el tejido social de esta entidad.
Por su parte, Diego Prieto Hernández señaló que la construcción de la paz en México es una tarea colectiva prioritaria y Guerrero es parte fundamental en este esfuerzo para recuperar la civilidad y concordia entre las y los mexicanos.
Enrique Pasta Muñúzuri subrayó que no se entiende GuerreroesPrimerosin la voz de las víctimas en busca de sus desaparecidos, las voces reclamando justicia para los muertos y olvidados de la Guerra Sucia y otros, “y tampoco se entiende sin la participación de las organizaciones que han buscado dignificar a la mujer, a la familia y a quienes buscan respeto a los derechos humanos”.
Aseveró que esperan confianza entre las organizaciones participantes y compromiso de las autoridades sobre las acciones que se puedan acordar y en la asignación presupuestal.
El sacerdote Jesús Mendoza explicó que muchos municipios de Guerrero presentan alta vulnerabilidad institucional, no cuentan con recursos económicos y están sometidos o coludidos con la delincuencia organizada.
Además, presentan desgaste en el tejido social, por lo que la población tiene desconfianza hacia las autoridades, por lo cual dicha entidad necesita paz sostenible, democracia participativa, desarrollo integral y sustentable, generación de una cultura de paz y colaboración interinstitucional.