Corrupción neoliberal
Ayer hubo una reunión en el World Trade Center.
Los gobernadores explotaron.
Pocos, porque no acudieron muchos.
Vaya, ni siquiera Silvano Aureoles, presidente de la Comisión de Seguridad y Justicia de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago).
Asistieron otros miembros de la misma: Francisco Domínguez, de Querétaro; Carlos Joaquín, de Quintana Roo, y Omar Fayad, de Hidalgo.
Pero trajeron opiniones de prácticamente los 31 estados de la república –Ciudad de México opina como Andrés Manuel López Obrador– o se comunicaron con sus colegas.
El sentimiento es único y lo escucharon representantes del Ejército Mexicano y de la Secretaría de Marina (Semar):
-O nos dan recursos o no nos hagan responsables de la inseguridad… No podemos ser corresponsables sin recursos, sin corporaciones, sin equipo y, peor aún, sin facultades.
Hubo una propuesta anexa:
-Establezcamos nuevos compromisos, un acuerdo, un pacto o como quieran llamarle pero con responsabilidades conjuntas.
Porque hasta ahora, aseguran, el dinero no llega o llega muy limitado y sin ninguna posibilidad de calendarización.
PACTO ENTRE GOBIERNOS
A ese encuentro seguirá otro.
Este martes en un hotel de la colonia Polanco, a partir de las 11 de la mañana, habrá una reunión plenaria de los gobernadores.
Prácticamente todos están en Ciudad de México.
Y por grupos –Acción Nacional (PAN) los convocó en un hotel de Polanco, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) en otro lugar de la misma zona- elaboran estrategias.
En triple sentido: críticas a la concentración registrada hasta ahora por el gobierno federal, propuestas en materia administrativa y planes conjuntos federación-estados-municipios si se quiere avanzar.
Los propios gobernadores tratan de distender el ambiente porque, asientan, cada principio de año se analizan estrategias en materia de seguridad públcia y protección ciudadana.
Pero esta vez está prevista la asistencia de tres secretarios: Luis Crescencio Sandoval, de la Defensa Nacional; Francisco Soberón, de la Marina, y Alfonso Durazo, de Seguridad y Protección Ciudadana.
Están emocionados porque está esbozada la posibilidad de contar con la presencia presidencial y así establecer un diálogo.
Ya lograron lo primero: no acudir como oyentes de palo a Palacio Nacional y para ellos es un triunfo de gran significado.
A ver cuánto lo aprovechan.
EL IMSS COMO SALVACIÓN
1.- Es extraño.
En estos momentos la gran crisis se da en materia de salud, con una oposición abierta de varios gobernadores al Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), organismo sucedáneo del Seguro Popular sin reglas claras.
No está en la agenda formal para hoy.
Y 2.- pero hay ideas interesantes.
Una de ellas es Germán Martínez Cázares, quien prácticamente propone convertir al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y a IMSS Bienestar en brazo operador del Insabi.
De golpe y porrazo se tendrían 80 hospitales de tercer nivel, no contemplados hasta ahora para atender a más de 60 millones de mexicanos desamparados.
Dijo más el ex director de ese organismo:
Ni la inexperiencia ni los equívocos de los ajustes administrativos gubernamentales “deben convertirse en un riesgo más para los usuarios y pacientes del servicio de salud”.