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ACAPULCO, Gro., 6 de noviembre de 2020.- Las recientes amenazas contra periodistas en Iguala, el contexto de violencia común y el que detonó el crimen organizado en la entidad, así como la violencia laboral y la desestimación de la labor periodística, fueron algunos temas abordados durante el conversatorio Paz y Medios, Periodismo en Tiempos Violentos que se desarrolló este viernes a través de la plataforma Zoom.
A manera de introducción
El director del Instituto para la Economía y la Paz, Carlos Juárez Cruz presentó datos sobre la violencia en México y cómo figura Guerrero en ello, ubicándose en el sitio número siete de estados “menos pacíficos”, luego de varios años de que estuvo entre los más violentos hasta alcanzar el lugar número 27 de 32.
“Salimos del fondo de los estados más violentos por primera vez desde que medimos paz y violencia en México (siete años), esto se debe a que los homicidios cayeron un 26 por ciento, los homicidios con violencia bajaron también, los delitos con arma de fuego; sin embargo seguimos viendo fenómenos como el de la violencia sexual y la familiar que va a la alza en el corto y en el largo plazo. La delincuencia organizada también que ha crecido su presencia en los últimos años, la extorsión, el narcomenudeo como tipos de violencia espectacular e impactante”, especificó.
Juárez Cruz subrayó que la violencia generada por el crimen organizado no es la única, ya que existe un incremento en la delincuencia común e interpersonal.
Dijo que los índices de violencia en este país son comparados con los registrados por dicho instituto en Venezuela, Honduras, o naciones en guerra como Afganistán, de ahí que México sea calificado como el país sin guerra más peligroso para hacer periodismo.
“Ocupamos el séptimo lugar global en impunidad y en homicidios de periodistas también, y nuestro estado, ocupa el séptimo lugar nacional en violencia contra mujeres periodistas de acuerdo a CIMAC”, reveló el experto en asuntos de paz.
Guerrero
El director de la oficina regional en México de la organización Artículo 19, Leopoldo Maldonado Gutiérrez dijo que van 14 periodistas asesinados desde el año 2000 en Guerrero, “posiblemente vinculado a su labor y dos periodistas desaparecidos de 2003 a la fecha”.
A nivel nacional, son 24 periodistas en calidad de desaparecidos y mencionó que en su reciente visita a la entidad, buscan, junto a otras organizaciones, diferentes mecanismos que ayuden a garantizar el derecho a la información, a partir del incremento “alarmante de violencia contra periodistas, comunicadores y comunicadoras”.
Añadió que a partir del año 2000 han sido documentados 135 asesinatos de periodistas en el país, posiblemente vinculados en razón de su ejercicio en cifras nacionales.
Maldonado Gutiérrez señaló que existe un alto nivel de impunidad de hasta 99 por ciento de los crímenes contra la prensa.
Dijo que existe un aumento de violencia contra las mujeres periodistas y de acuerdo con sus registros, existen 111 casos documentados durante el primer semestre de este año, lo cual muestra un incremento que duplica la cifra del año pasado en el mismo periodo, cuando que eran 56 los casos. Dedujo que hay una mayor cultura de denuncia, aunque también se habla de una cifra negra.
Violencia económica
La académica investigadora de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, Adriana Casasola criticó la precariedad económica en la cual los reporteros y periodistas ejercen su labor, lo cual limita su movilidad.
Habló de que se ejerce una “brutal violencia económica” contra el gremio, lo que lleva al ejercicio de diferentes oficios al periodismo.
Leopoldo Maldonado expuso que la austeridad promovida por el gobierno federal ha traído consigo consecuencias laborales “funestas” con los recortes de nóminas, ya que el 47 por ciento de la publicidad oficial se concentra en algunos medios de comunicación.
El periodista y escritor guerrerense, David Espino sugirió apostar a la formación de nuevas audiencias, lectores y públicos para que sean quienes consuman propuestas periodísticas producidas con ecuanimidad, con rigor periodístico y de manera independiente.
Coincidieron en que los medios digitales son una alternativa para informar a las personas, no obstante, Espino afirmó que son pocos los que mantienen una línea editorial cuya producción está claramente dirigida a los lectores o las audiencias.