Teléfono rojo
¿Un sol artificial en la tierra?
¿Podrá imaginar mi incrédulo lector, que pudiese usted eliminar o reducir, digamos un 90 por ciento de su presupuesto mensual, todos los gastos relacionados con energía: electricidad, gas, gasolina y otros, además de que aquellos servicios contratados que requieren energía para existir: teléfono, internet, televisión por cable y demás, también bajen su costo radicalmente?
Para empezar, no es broma; el Día de los Santos Inocentes fue ayer 28 de diciembre y hoy 29, a punto de culminar este malhadado año 2020, referiré lo que es considerado el “santo grial” de la producción energética: la “fusión nuclear”.
Después de la primera mitad del Siglo 20, estuvo en auge la obtención de electricidad mediante procesos de “fisión nuclear”. En este caso, los núcleos atómicos se dividen y liberan enormes cantidades de energía en ese proceso. La energía liberada es utilizada para producir vapor de agua, el cual a su vez mueve una turbina que genera electricidad. Este es un proceso que deja residuos altamente radioactivos y es sumamente peligroso, como sin duda nos muestra severamente el accidente de Chernobyl, en la antigua Unión Soviética.
Al contrario de la fisión, la fusión nuclear se logra cuando los núcleos atómicos se fusionan, se juntan y forman otros elementos, liberando en este acto enormes cantidades de energía, que calienta el agua, mueve la turbina y genera electricidad.
Esta fusión nuclear es la mismísima que se lleva a cabo continuamente en el Sol de nuestro sistema planetario desde hace más de 4 mil 500 millones de años y supuestamente sucede igual, aunque con diferentes edades, en todas las estrellas del universo conocido.
Recapitulamos: la fusión, como su nombre indica, sucede cuando los núcleos atómicos se fusionan y la fisión es cuando se dividen los núcleos para generar energía.
La fusión ha sido el santo grial de la producción energética, buscada durante décadas y aunque ya se logrado en nuestro planeta por breves períodos, los científicos aún tienen que crear la tecnología para que la fusión producida artificialmente en la Tierra sea lo suficientemente estable y controlable para obtener beneficios prácticos
Y esta es precisamente la noticia de fin de año relacionada con el tema: que el pasado día 20 de diciembre el “KSTAR”, “Korea Superconducting Tokamak Advanced Research” o Dispositivo Koreano Superconductor Tokamak de Investigación Avanzada, conocido coloquialmente como “el sol de Corea”, logró mantener contenida y controlada mediante poderosísimos campos magnéticos (a esto se refiere la palabra Tokamak), esta materia supercaliente, llamada “plasma”, a 100 millones de grados centígrados y durante 20 segundos.
Existen otras instalaciones similares en diversos países, incluso se está construyendo un dispositivo multinacional similar en Francia, pero hasta ahora solo se habían logrado ocho segundos de plasma estable y antes de eso, apenas 1.5 segundos.
Esta cadena progresiva de éxitos es alentadora y los científicos ya establecieron una nueva meta para el año 2025: lograr la tecnología necesaria para mantener el plasma a 100 millones de grados centígrados, durante 300 segundos, lo cual, prácticamente sería la consolidación del sueño ancestral de obtener energía ilimitada, limpia y a bajo costo para la humanidad.
Algunos dicen que tal sueño es absolutamente utópico, pero…”Chale”, está por terminar el trágico año 2020 que puso en jaque a toda la humanidad moderna y no nos caerían mal algunos pensamientos positivos y alentadores para la golpeada humanidad antes del 31 de diciembre.
Gracias a todos ustedes por haber leído mis comentarios en este año triste y les deseo buen porvenir; como decía mi camarada Spock: Larga Vida y Prosperidad.
Feliz 2021 a todos