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OAXACA, 4 de septiembre de 2021.- Familiares y amigos de Roxana Ruiz, oaxaqueña acusada de matar a su violador, realizaron un boteo en Pinotepa Nacional para apoyar en los gastos del proceso legal que enfrenta desde el reclusorio de Neza-Bordo, en el Estado de México.
En calles del centro de Pinotepa Nacional, en la región de la Costa de Oaxaca de donde es originaria Roxana, colocaron pancartas pidiendo su libertad además de consignas como “Roxana es valiente no delincuente”, “Todas somos Roxana” y “Juicio justo para Roxana”, entre otras.
A este tipo de acciones se sumaron colectivos feministas como la asamblea vecinal Nos Queremos Vivas Neza, la cual se formó tras el feminicidio de Valeria, una niña de 11 años que fue violada y asesinada en una combi del transporte público en 2017.
Una de las integrantes de esta asamblea, Elsa Arista, dijo que hace un mes conocieron este asunto porque la mamá de Roxana les entregó una carta y cuando la leyeron, dijeron que “este caso tiene que ver justo con la violencia que se vive en Neza”.
Desde entonces han realizado diversas actividades para hacer visible el caso de Roxana, sumando a otras organizaciones y personas de diversos sectores.
Cuando empezaron a seguir el asunto, estaban por cerrar el caso, pero con una abogada defensora lograron que se reabriera y el juez ordenó que se investigara ahora con perspectiva de género y con una defensa digna, pues por omisiones de un defensor de oficio, el juez no conoció las circunstancias en las que ocurrió el homicidio.
La próxima audiencia se realizará el próximo 6 de septiembre y se fijó como plazo para concluir las investigaciones el 13 de octubre de este 2021 y la historia de Roxana es una más de miles de mujeres mexicanas que migran a la Ciudad de México en busca de oportunidades para mejorar su calidad de vida.
Ella se fue a vivir con su esposo hace siete años al municipio de Nezahualcóyotl, con quien tuvo un hijo, actualmente de cuatro años de edad, antes de separarse de él. Rentó un cuarto donde vivía sola mientras su suegra la ayudaba con el cuidado del menor mientras trabajaba en un puesto de venta de papas.
Sin embargo, una noche de mayo, una mujer la invitó a tomar una cerveza cuando salió de trabajar y después un individuo se les unió. Más tarde, el hombre se ofreció a acompañarla al lugar donde vivía; al llegar le pidió permiso para que lo dejara dormir ahí esa noche, con el pretexto de que vivía lejos.
Lo dejó dormir en el piso, pero Roxana narró que en un momento este individuo la atacó, golpeándola y abusando sexualmente de ella. En sus declaraciones explicó que como pudo, logró asfixiarlo con una playera.
Dado el shock en el que se encontraba, explicó que lo único que quería en ese momento era deshacerse del cadáver, por lo que lo metió en un costal y sacó a la calle con la intención de abandonarlo en una esquina.
Fue en ese momento que uno de sus vecinos la vio y momentos después llegó la patrulla de la que bajaron policías para llevársela detenida.
Roxana Ruiz ha declarado que será condenada por defenderse y haber castigado a su agresor y no quedarse callada. Con información de Quadratín Oaxaca.