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COYUCA DE BENÍTEZ, Gro., 11 de noviembre de 2024.- Al menos cinco mil habitantes de 10 comunidades de Coyuca de Benítez cumplieron 18 días sin servicio de luz eléctrica, sin red de teléfono e internet, tras el paso del huracán Otis, que dejó derribo de árboles y torres de luz, así como socavones y deslaves carreteros.
Desde el pasado 25 de octubre, el cierre carretero ha obstaculizado la llegada de víveres y demás ayuda hacia los pobladores.
Los pueblos afectados de la parte norte son: San Cruz, Barrio Nuevo, La Laja, comunidades ubicadas al borde del río Coyuca y que con las torrenciales lluvias de la noche del 24 de octubre, creció y el agua salió a inundar las viviendas.
En el poblado Las Pulgas, los habitantes sufrieron afectaciones en sus viviendas, donde los fuertes vientos volaron los techos de lámina de las casas, mientras que en Atoyaquillo se vieron afectadas las escuelas y casas, además se destruyó el vivero del programa social Sembrando Vida.
Paso Real es la comunidad con pocas afectaciones, debido a que los cerros que rodean el poblado lograron contener y desviar los fuertes vientos.
En las comunidades Aguas Blancas y Tepetixtla, ambas con el mayor número de habitantes, se restableció la electricidad y los daños están a la vista de todos.
En Aguas Blancas el techado de la cancha municipal se desplomó y nadie ha comenzado con el retiro de los escombros.
Mientras que Tepetixla, la falta de luz eléctrica ha provocado la carencia de alimento porque varios productos no se pueden refrigerar.
En Barrio Nuevo del Progreso, donde se derribaros varios techos de las viviendas, llego ayuda de despensas, pero la población asegura que el comisario municipal repartió los víveres a sus familiares y personas allegadas.
Los pueblos de Humedades, La Remontita y Felicidad de los de los Rosales, continúan incomunicados por el destrozo de caminos que obstaculizan el paso de vehículos.
En estas 10 comunidades de Coyuca de Benítez la petición de los habitantes es la misma, exigen ayuda de los tres órdenes de gobierno, que les reestablezcan el servicio de luz y de teléfono.
En Barrio Nuevo del Progreso las madres de familia claman la presencia de médicos, porque desde 11 años no funciona su clínica de salud y, en este poblado permanecen más de 10 mujeres embarazadas que necesitan la ayuda de doctores para parir.