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CIUDAD DE MÉXICO, 7 de abril de 2024.- Derivado del conflicto diplomático entre México y Ecuador tras la irrupción a la Embajada mexicana el pasado 5 de abril para detener al exvicepresidente Jorge Glas, la Cancillería ecuatoriana aseguró que ningún delincuente puede ser considerado un perseguido político, por lo que advirtió que México violó lo establecido en convenciones sobre asilo y combate a la corrupción.
A través de un comunicado, el gobierno de Ecuador explicó que en un primer momento, la Embajada de México recibió el 17 de diciembre de 2023 a Jorge Glas en calidad de huésped, posteriormente pasó a ser considerado solicitante de asilo.
“El mencionado ciudadano, sobre el cual pesan dos sentencias ejecutoriadas por delincuencia común, quien tenía una medida cautelar con la obligación de presentarse periódicamente ante la autoridad judicial, de ninguna manera puede ser considerado como un perseguido político, religioso o étnico”, detalló.
El 29 de febrero de 2024, la Cancillería solicitó a la Embajada de México, con base en lo dispuesto en el artículo 22 de la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas, la autorización de la Embajadora de México para que la Policía Nacional pudiera cumplir con la orden de captura dispuesta por la Corte Nacional de Justicia, la cual fue negada.
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