Dejan un desmembrado atrás de Soriana de Renacimiento en Acapulco
CHILPANCINGO, Gro., 2 de mayo de 2014.- En una reunión a puerta cerrada, dirigentes de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), comisarios de El Valle y representantes de El Ocotito, municipio de Chilpancingo, discutieron los problemas internos que enfrenta la organización comunitaria.
El encuentro se realizó a dos semanas de que inició un conflicto interno que fracturó a la UPOEG de El Ocotito en dos grupos.
Con el rompimiento, el grupo disidente desconoció a Bruno Plácido Valerio como su máximo dirigente y lo acusaron de traición y entreguismo al gobierno, impidieron la instalación de la Feria de la Santa Cruz y acusaron a varios comandantes de la Policía Ciudadana de cometer abuso de poder, estar cooptados por los criminales, liberar a detenidos a cambio de “cuotas” y de robarse el ganado, viviendas, armamento, bienes y artículos decomisados a la delincuencia.
Tras la fractura en la organización comunitaria, el grupo base que apoya a Plácido Valerio instaló un nuevo centro de operaciones de la Policía Ciudadana, ahora en el poblado de Buena Vista; con ello también trasladaron a una veintena de detenidos que antes se mantenían bajo resguardo en la comisaría de Mohoneras.
A través de un desplegado, los opositores acusaron a Plácido Valerio de venderse con las autoridades, carecer de autoridad moral para dirigir a la UPOEG y gastar en vicios el dinero que recibe para la operación del movimiento.
Con el objetivo de aclarar las acusaciones, Plácido Valerio se reunió en Tierra Colorada con los comisarios de Dos Caminos y Mohoneras y el promotor de la UPOEG Gonzalo Torres Valencia.
También participaron la coordinadora de los presidentes de colonia de Ocotito, Nelva Edilia Sánchez López y el promotor Cresenciano Ramírez López, líderes del grupo disidente.
La reunión inició a las 11:00 horas y duró más de cinco horas; no se permitió el acceso a la prensa ni a la población.
Entrevistado al término del encuentro, el dirigente de la UPOEG explicó que fue la primera de una serie de reuniones, con el objetivo de aclarar los problemas internos y señalamientos que enfrentan varios integrantes del movimiento.
Dijo que la falta de conocimiento sobre la forma en que opera el sistema comunitario, la infiltración de la delincuencia organizada y los intereses de grupos políticos fueron las causas principales del conflicto interno que enfrenta la UPOEG.
Por ello, acordaron la realización de una asamblea popular para el día 9 de mayo, en la que aclararán las acusaciones vertidas contra varios integrantes de la UPOEG.
Esto se realizará a través de careos entre los acusados y denunciantes, para permitir que ambas partes tengan la posibilidad de presentar evidencia y ser juzgados en consenso popular.
“Vamos a revisar todos los expedientes, hay que entender que un movimiento por la seguridad como éste afecta intereses y cada quien dice lo que le conviene, por eso es el momento de aclarar las cosas mediante un careo y la presentación de pruebas”, explicó Plácido Valerio.
También anunció la realización de asambleas populares en cada comunidad, para depurar a las policías ciudadanas y nombrar a un coordinador de seguridad.
Respecto a las acusaciones que pesan sobre él y las mantas que colgaron los grupos opositores que lo señalan de traidor, el dirigente de la UPOEG respondió: “Yo no voy a pedir que quiten las mantas, el que nada debe nada tema y en su momento tendrán que probar cada cosa que dicen en mi contra. Que yo me reúna con autoridades o políticos de diferentes partidos no significa traición, forma parte de las negociaciones para el avance del movimiento”.