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CHILPANCINGO, Gro., 15 de julio de 2014.- Unos 35 trabajadores de Disney han sido detenidos desde 2006 a la actualidad, ya sea por abuso infantil o por posesión de pornografía infantil, según una investigación desarrollada por la cadena CNN.
Según lo publicado en Excélsior, otros dos casos de trabajadores de SeaWorld y cinco de Universal Studios se suman a los de Disney, para un total de 42 casos de este tipo. En 32 de los casos ya existe una sentencia, pero en el resto aún no se ha completado el proceso.
Entre los detenidos figuran personal de seguridad, una costurera, guías turísticos, empleados de mantenimiento y personal de las tiendas de regalos.
Dos de los casos investigados, de posesión de pornografía infantil, ocurrieron dentro de las instalaciones de Disney; sin embargo, ninguno de los 35 casos se refiere a niños o adolescentes que hayan visitado los parques de Disney.
Proveer un ambiente seguro para los niños y las familias es una responsabilidad que nos tomamos muy en serio. Tomamos amplias medidas para ello, incluyendo la verificación de antecedentes penales y supervisión de ordenadores”, dijo en declaraciones la portavoz de Disney, Jacque Wahler.
En ese tipo de temas tenemos tolerancia cero. La empresa ha despedido a un empleado que en julio fue detenido. Se controla a todos los trabajadores antes de entrar a formar parte de la plantilla de Universal”, aseguró un portavoz de Universal Studios.
La seguridad de nuestro equipo y nuestros trabajadores tiene máxima prioridad”, insistió el portavoz de SeaWorld, Nick Gollattscheck.
El grupo Disney gestiona Disney World en Florida, Disneyland en California y un Disney Resort en Hawai, entre otros. A la empresa estadunidense pertenece además el 51 por ciento de Disneyland en París, según el informe de cuentas de 2013. Asimismo, participa en Disneyland Hong Kong y en el resort de Shanghái.
La última redada, de acuerdo con el reportaje de CNN, fue en julio; los detectives del condado de Polk arrestaron a dos trabajadores de Disney y a uno de Universal Studios.
Uno de los detenidos es Allen Treaster, trabajador de Disney de 40 años que estableció contacto online con un adolescente de 15 años. La Policía se refiere a él en sus informes como el gran oso Teddy perseguidor de jóvenes y sostiene que se dirigió a ver al menor tras haberle mandado un mensaje en el que decía que iba a hacer realidad su fantasía.
Robert Kingsolver, encargado de reparaciones y acusado de haber intentado tener relaciones sexuales con menores, ha defendido su inocencia y ha asegurado que sólo acudió a un supuesto encuentro con una niña para advertirle que no debía tener relaciones con adultos.