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ACAPULCO, Gro., 20 de enero de 2016.- La mayor parte de las casas de asistencia social que existen en Guerrero son para rehabilitación o tratamiento de adicciones, muy por arriba de las que existen para atender a otros grupos vulnerables como son los menores, adultos mayores, enfermos terminales, con trastornos mentales o las personas en situación de calle para las cuales no existe ningún albergue.
Guerrero es el tercer estado del país con mayor porcentaje de población en situación de pobreza y en pobreza extrema. Según datos del Consejo Nacional de Evaluación de Políticas en Desarrollo Social (Coneval), el 65.2 por ciento de los guerrerenses es pobre y el 24.5 extremadamente pobre.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) detectó en su Censo de Alojamientos de Asistencia Social 2015 que en Guerrero 2 mil 373 personas habitan 117 casas de asistencia social, de las cuales 79 son para el tratamiento de adicciones, 11 para albergar a adultos mayores, nueve para menores de edad, seis para otra clase de población vulnerable, cuatro para indígenas, tres para mujeres y dos para enfermos terminales.
Existe también un albergue para enfermos mentales, uno para migrantes, otro para mujeres y sus hijos que han sido víctimas de violencia intrafamiliar, y ninguno para personas en situación de calle, grupo vulnerable para que el que sí hay casas de asistencia en estados como Guanajuato e Hidalgo, cuyos niveles de pobreza extrema son apenas del 5.4 y 12.3 por ciento, respectivamente.
El 61.2 por ciento de los usuarios de los albergues, mil 453 personas, están en casas para rehabilitación y tratamiento de adicciones. En las casas hogar para menores hay 280 personas, 167 en las que existen para adultos mayores y sólo 20 en las de mujeres.
La principal fuente de dinero para las casas de asistencia son las cuotas de los residentes o sus familiares, seguida por las donaciones de particulares, colectas o rifas, aportaciones de gobierno y de asociaciones religiosas. Sólo nueve reciben apoyo de empresas o fundaciones y cinco comercializan productos elaborados por sus residentes.
El 70 por ciento de los albergues son operados por asociaciones civiles, el 10.2 por ciento por instituciones de gobierno. De las 117 casas de asistencia en Guerrero, sólo dos son administradas por asociaciones religiosas y una por una institución de beneficencia privada.