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CHILPANCINGO, Gro., 3 de mayo de 2014.- Bajo resguardo policiaco, militar y civil, los pobladores de Ocotito, municipio de Chilpancingo, realizaron la edición 106 del tradicional Paseo del Pendón, que marca el inicio de la celebración religiosa de la Santa Cruz.
La tradición tiene 106 años de antigüedad y la feria que se instala anualmente en el centro de Ocotito, se convirtió en la más importante de la región conocida como El Valle.
Este año las celebraciones fueron obstaculizadas por un grupo minoritario de pobladores, quienes impidieron la instalación de la feria tradicional, bajo la excusa de que no existían condiciones de seguridad.
“Nos bloquearon todo, hay un grupo de unas seis personas que vinieron a amenazar a la gente de manera agresiva y violenta. Nosotros no queremos problemas, únicamente estamos tratando de preservar esta tradición que tiene más de cien años”, expresó en entrevista Yolanda Bisoso Santiago, presidenta del Comité Organizador de la Feria 2014.
Acusó a Silvestre Plancarte Mondragón, Nelva Edilia Sánchez López, Odón Mendoza, Alejandra Cabañas, Alberto Reyes y Jesús Santiago Sánchez de amenazar a los pobladores de Ocotito para impedir la instalación de la feria.
Los opositores a la celebración impidieron la instalación de juegos mecánicos, puestos de comida, ropa y mercancía, palenque y enramada.
También bloquearon el acceso a la plaza de toros, donde de manera tradicional se realizan jaripeos-baile.
La condición que pusieron para la realización de la feria, es que ellos administrarían los ingresos generados por la plaza de toros, palenque y de la enramada en la que se vende cerveza y amenizan grupos locales.
Por su parte el comisario municipal de Ocotito, Luis Humberto Calleja Morales, indicó que la feria de la Santa Cruz es una tradición centenaria y no se le puede negar a la gente esta celebración.
Por ello, felicitó a la población de Ocotito por “tomar la batuta” y sacar adelante, por lo menos, la celebración religiosa.
A pesar de las amenazas y los desplegados en las redes sociales, en los que se aseguraba que la gente del pueblo no quería la feria por motivos de seguridad, hombres, mujeres y niños salieron a las calles para realizar el tradicional paseo del pendón.
Más de 2 mil personas recorrieron las principales calles para participar en la fiesta más grande del pueblo.
Música de banda y de viento, cuetes, bailes tradicionales, carros alegóricos, caballos, mezcal, whisky, cerveza y trajes típicos alegraron la celebración, que fue encabezada por la reina de la feria.
Elementos del Ejército y de las policías Ciudadana, Estatal y Federal se encargaron de resguardar la seguridad de este festejo tradicional, al que no asistió ningún político ni funcionario público, incluyendo al presidente municipal Mario Moreno Arcos.
El contingente hizo una escala en la iglesia del pueblo, donde dejaron una ofrenda floral y se realizaron varias danzas.
El paseo del pendón concluyó con una comida en la cancha de Barrio Viejo, colonia fundadora del poblado de Ocotito.
Por la noche se realizó un baile en el lugar; los habitantes también habilitaron la cancha de futbol para realizar jaripeos, ya que el grupo opositor “secuestró” la plaza de toros.
“¡Queremos feria!”, coreaban los miles de pobladores que salieron a las calles para participar en la celebración más importante del Valle de Ocotito, que fue bloqueada por un grupo minoritario de habitantes.