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CHILPANCINGO, Gro., 10 de abril de 2015.- El Comité Ejecutivo Nacional del PRD pretende imponer al priísta Mario Moreno Arcos como gobernador sustituto de Guerrero y a su hermano Ricardo Moreno Arcos como candidato a la alcaldía de Chilpancingo, denunció el diputado local perredista Ricardo Iván Galindez Díaz.
En conferencia de prensa advirtió que, de concretarse esta “aberración política”, él y varios militantes y líderes del sol azteca abandonarán el partido.
Desde hace algunos días se rumoró en la esfera política que Mario y Ricardo Moreno Arcos abandonarían el PRI, porque dicho partido le negó a Ricardo la candidatura por la alcaldía capitalina.
El diputado Galindez Díaz confirmó que la dirigencia nacional del PRD ya analiza la posibilidad de admitir a ambos priístas, otorgarle a Ricardo la candidatura por la presidencia municipal y postular a Mario como gobernador suplente, con la finalidad de reforzar la campaña de Beatriz Mojica Morga, candidata del sol azteca a la gubernatura.
Indicó que el operador detrás de esta estrategia sería el gobernador de Morelos, Graco Luis Ramírez Garrido Abreu.
“Es una actitud perversa la que está mostrando la dirigencia nacional del PRD, con la complacencia de la dirigencia estatal encabezada por Celestino Cesáreo Guzmán y por diversas expresiones, como el grupo de Sebastián de la Rosa, el de David Jiménez Rumbo y el de Víctor Aguirre Alcaide”, recriminó el legislador.
Dijo que detrás de esta imposición están Jesús Zambrano Grijalva y Jesús Ortega Martínez (mejor conocidos como Los Chuchos), en complicidad con el presidente del partido, Carlos Navarrete Ruíz.
Galindez Díaz reprobó que el PRD trate de imponer a dos políticos “multiseñalados por sus vínculos con el crimen organizado”.
Recordó que el PRD llevó a José Luis Abarca Velázquez a la alcaldía de Iguala, un personaje vinculado con el grupo delictivo Guerreros Unidos.
Actualmente el ex alcalde está preso por el asesinato de seis personas y la desaparición de 43 estudiantes de Ayotzinapa, en múltiples ataques perpetrados en Iguala la noche del 26 de septiembre por integrantes del cártel Guerreros Unidos, en coordinación con policías municipales coludidos.
Para el legislador, la dirigencia del sol azteca “no aprendió” con el caso Ayotzinapa y nuevamente trata de imponer a personajes vinculados con el crimen organizado, como son Ricardo y Mario Moreno Arcos.
Dicha acusación la sostuvo en base a una carpeta informativa que registra algunos trabajos de inteligencia realizados por cuerpos de seguridad del Estado mexicano, la cual fue publicada en noviembre del año pasado y revelaba posibles nexos de 12 alcaldes guerrerenses con el crimen organizado, entre ellos Mario Moreno Arcos.
Ricardo Iván Galindez también recordó que en agosto de 2010 el PRD admitió en sus filas al priísta Ángel Aguirre Rivero y lo postuló como candidato a la gubernatura.
Aguirre Rivero ganó la contienda, pero tuvo que pedir licencia para separarse del cargo el 23 de octubre de 2014, tras los hechos violentos de Iguala.
“La dirigencia nacional del PRD no aprendió del caso Ayotzinapa. Hoy tienen a los maestros, hoy tienen a los normalistas, hoy tienen el movimiento social activo y vivo, con la elección en riesgo por la crisis del sistema de partidos. El PRD le abrió las puertas a Ángel Aguirre y nos dio el tiro de gracia. Ahora pretenden traer a Mario Moreno Arcos y su hermano, multiseñalados por vínculos con la delincuencia”, recriminó el diputado.
Sostuvo que desde 2008, con la llegada de Los Chuchos, el PRD se desvinculó de los movimientos sociales y de su esencia de izquierda, producto de la lucha social.
“Actualmente el PRD se está conduciendo como un botín político. El partido está secuestrado por corrientes que quieren conservar sus cotos de poder en el estado, como son David Jiménez Rumbo, Sebastián de la Rosa y Víctor Aguirre Alcaide. Ellos tienen sumido al PRD en la peor crisis que se ha dado. En la dirigencia nacional los que siguen haciendo imposiciones y vetando a personajes importantes de la izquierda son Los Chuchos”, aseguró.
Por ello, sostuvo que el PRD ya no obedece a intereses ciudadanos, sino a la “perversidad política” de sus cúpulas.
El morenazo guerrerense
El diputado perredista Ricardo Iván Galindez Díaz comparó la necedad de Mario Moreno Arcos por imponer a su hermano Ricardo en la alcaldía de Chilpancingo, con el llamado “moreirazo” de Coahuila, donde el ex gobernador Humberto Moreira endeudó al estado con más de 37 mil millones de pesos en la pugna por imponer a su hermano Rubén Moreira como predecesor en el cargo.
“Sólo que aquí no será el moreirazo, ¡aquí será el morenazo!”, emuló en referencia al apellido Moreno.
Sostuvo que admitir a los hermanos Moreno Arcos en el PRD es “una aberración” y “ventilaría una actitud por demás caciquil”.
El legislador subrayó que durante el gobierno de Mario Moreno Arcos, Chilpancingo ha vivido la peor crisis económica, política y social de su historia, ya que está devastado por problemas de ingobernabilidad, inseguridad, desarrollo social y desorden público.
“¡Y ahora nos quiere imponer a su hermano!, ¡se nos hace indignante!, esto va más allá del nepotismo. Entregarle el poder al hermano es un acto por demás nepótico y antidemocrático”, reprochó.
Galindez Díaz advirtió que el PRD no puede designar a Ricardo Moreno como candidato a la alcaldía, porque no se inscribió en el proceso interno.
Advirtió que si el PRD “perpetra la imposición” de los hermanos Moreno Arcos, él y varios militantes y líderes del sol azteca abandonará el partido y le darán voto de castigo.
“Nuestra postura va a ser en contra, no vamos a votar ni a alinearnos a favor de esas decisiones cupulares. Hemos sido sensatos, hemos sido prudentes, hemos sido mesurados, pero ante un acto de esta naturaleza con toda sinceridad no podemos, se nos va a acabar el discurso, no habrá discurso para decirle a la gente ante un acto por demás caciquil y nepótico para hacer campaña o fraguar el proyecto que Chilpancingo requiere”, sostuvo.