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CHILPANCINGO, Gro., 19 de febrero de 2014.- A pesar de que los recursos presupuestados para el gasto corriente del Instituto de Transparencia y Acceso a la Información de Guerrero (ITAIG) en este año, sufrieron una merma sustancial por el pago del bono de retiro por 843 mil pesos a cada uno de los consejeros salientes, esa institución no ha caído ni caerá en la parálisis y está comprometida a cumplir con sus objetivos empleando creatividad a falta de recursos, sostuvo el actual presidente consejero Crescencio Almazán Tolentino.
Incluso señaló que el ITAIG actualmente lleva a cabo los procedimientos que tiene bajo su responsabilidad con toda normalidad, incluso se ha reestructurado la página de internet, misma que se ha enriquecido y se actualizará permanentemente, además de igual manera se utilizarán las redes sociales para difundir los procedimientos y actividades que lleva a cabo.
Sobre la revisión del manejo financiero, Almazán Tolentino recordó que en la sesión efectuada el pasado día 14, los consejeros dictaron el acuerdo de solicitar a la Auditoría General del Estado que se encargue de ella, con el objetivo de dar transparencia a su manejo y determinar si los ex consejeros incurrieron en alguna irregularidad al autorizarse el mencionado bono de retiro.
Asimismo confirmó que el ex consejero Ernesto Araujo Carranza rembolsó al organismo la cantidad de 216 mil 553 pesos con 43 centavos, de los 843 mil pesos que junto a sus compañeros María Antonia Cárcamo Cortez y Marcos Ignacio Cuevas se asignaron como finiquito por ocho años de servicio, pues ese monto corresponde al Impuesto Sobre la Renta (ISR) que se debe enterar por ley a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
El presidente del ITAIG señaló además que Araujo Carranza ha sido hasta el momento el único de los antiguos consejeros que ha reintegrado esa cantidad, pues no han recibido ningún documento que sustente una acción similar por parte de la ex presidenta María Antonia Cárcamo Cortez y el abogado Marcos Ignacio Cuevas.