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CHILPANCINGO, Gro., 20 de febrero de 2014.- Desde la jornada del miércoles, el gobierno del estado se dio a la tarea de sacar en camiones miles de despensas, que no se entregaron a los damnificados de la tormenta tropical Manuel.
El martes 11 de febrero, un grupo de adultos mayores denunció la existencia de miles de despensas abandonadas en un almacén del Sistema Integral para el Desarrollo de la Familia (DIF), en Chilpancingo.
Los medios de comunicación documentaron la existencia de miles de despensas en fotografías y vídeos; miles de alimentos permanecían tirados bajo el sol, aún con cartas y mensajes de apoyo que escribieron las personas que los donaron.
Tres días después, el 14 de febrero, el titular de la Contraloría General del Estado, Antonio Arredondo Aburto acudió al almacén para realizar una inspección, abrir una investigación y deslindar responsabilidades.
Sin embargo, el contralor únicamente encontró 127 cajas de cereal, 75 botes de mayonesa, 200 latas de leche clavel y 25 cajas de café soluble.
Las miles de despensas desaparecieron en los tres días que le tomó al contralor presentarse al almacén para inspeccionarlo.
A casi una semana de la visita del contralor, el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) y empresas privadas iniciaron una labor de desalojo de despensas.
Vecinos del lugar reportaron que desde el miércoles 19 de febrero llegaron varios camiones que son cargados con los apoyos. Este jueves continuó la labor de carga.
De acuerdo a uno de los trabajadores, cada tráiler tiene una capacidad de 15 a 18 toneladas.
Reporteros de diferentes medios de comunicación acudieron al almacén alrededor de las 15:00 horas de este jueves y constataron la presencia de cinco, cargados con despensas, las cuales fueron cubiertas con lonas de colores.
Entre los cinco camiones cargados sumaban un mínimo de 75 toneladas de despensas.
Al levantar la lona, se confirmó que las despensas correspondían a los apoyos que los estados mandaron para los damnificados por la tormenta tropical Manuel, desde septiembre del año pasado.
Las despensas aún contenían las cartas de apoyo y solidaridad que varias personas escribieron para las familias afectadas por la contingencia.
Leche, arroz, sopa de pasta, café, papel higiénico, aceite, atún y pañales fueron algunas de las donaciones que se observaron en las despensas que transportaban los camiones y que fueron cubiertas con lonas.
Durante el lapso que los reporteros se mantuvieron afuera del almacén, llegó otro tráiler vacío para ser cargado con los apoyos.
De acuerdo al reporte que presentó el contralor general del estado el 14 de febrero, durante su inspección no encontró ninguna de las miles de despensas que este jueves nuevamente constataron los medios de comunicación y los vecinos del almacén.
Un chófer de tráiler reveló que las despensas tienen como destino el municipio de Zihuatanejo.
“Vamos a llevar despensas a Zihuatanejo, ya se fueron varios camiones ayer para diferentes puntos del estado, es para regalárselo a la gente, aquí en Chilpancingo no hemos repartido, donde sí ya llevamos es a la montaña”, comentó.
La presencia de los reporteros molestó a algunos trabajadores, que incluso gritaron improperios y movieron sus unidades lejos de los comunicadores.
El vocero del gobierno de Guerrero, José Villanueva Manzanares se negó a dar un posicionamiento sin que antes exista una denuncia por la repentina aparición de las miles de despensas que el contralor general del estado no encontró en su visita de inspección al almacén del DIF.