CIUDAD DEL VATICANO, 26 de abril de 2014.- Uno de los primeros actos después de la proclamación como santo de Juan Pablo Segundo será renovar su tumba. Ésta se ubica en el altar de San Sebastián, en la segunda capilla de la nave derecha de la Basílica de San Pedro.
En las Grutas Vaticanas era posible dejar un dibujo, un mensaje, una carta o una fotografía. En la tumba de Karol Wojtyla se han encontrado testimonios y peticiones de muchos tipos.
Las peticiones, los agradecimientos, los mensajes están escritos en pedazos de papel, en boletos de autobús, en recibos fiscales ya sea con pluma o incluso con lápices de maquillaje para ojos.
Los mensajes son diversos: gracias por favores recibidos, peticiones de salud, trabajo, amor, peticiones de ayuda para poder tener hijos, para encontrar a la persona adecuada con la cual contraer matrimonio y hasta ayuda para conquistar a un conductor de televisión. Quien sabe que peticiones recibirá ahora que ya será santo.
Con información de il Messaggero.it