Azoyú: incendio en tiradero clandestino afecta 50 hectáreas de pastizal

AZOYÚ, Gro., 20 de enero de 2020.- Un incendio en un basurero clandestino a orilla de la carretera en la comunidad de Quetzalapa provocó que se quemaran 50 hectáreas de pastizales que pertenecen a la parcela de la escuela secundaria técnica número 85.

El presidente del comité de padres de familia de la institución, Joel Ramos Martínez señaló que “todos los años tenemos ese mismo problema, aquí tenemos un basurero, pero desafortunadamente el aire hace que vuele la chispa aquí, ya que el basurero clandestino está pegado”.

Añadió que el comité de padres de familia y directivos habían rentado la parcela con pastura a ganaderos en 12 mil pesos, que serían fondos para resolver algunas de las necesidades de la escuela, pero se perdió todo con la deflagración, además de los postes de la cerca.

Solicitó al alcalde de Azoyú, José Efrén López Cortés mandar maquinaria para dar mantenimiento a ese basurero, donde a pesar de que hay un letrero con la advertencia de que se multará a quien arroje desechos, la gente sigue tirando basura de todo tipo.

“Bueno en la presidencia de Azoyú el otro día pusieron a un grupo, pero todos tienen paga y no hay dinero para cubrir esos gastos, es imposible aquí para apagar este incendio, va a llegar hasta los límites con Acalmani (comunidad de Igualapa), porque a la hora que estamos el aire va a salir hacia arriba el aire y la chispa vuela, ahorita se está quemando aquí, pero más adelante ya brincó la chispa y para que la apague uno está muy difícil”, expresó.

Las cortinas de humo alcanzaron varios kilómetros de altura, y a las 4 de la tarde todavía unos seis voluntarios de la población con bombas aspersoras en sus espaldas abastecidas con agua no podían sofocar el fuego que inició a las 11 de la mañana.

Desde hace 10 años, algunos alcaldes de la época dejaron entrever la posibilidad de un basurero intermunicipal o regional, sin embargo no se cristalizó; en sitios como Azoyú, Igualapa, Cuajinicuilapa, Ometepec, Tlacoachistlahuaca, Xochistlahuaca, Marquelia y Juchitán no cuentan con rellenos sanitarios o basureros que cumplan con la Norma Oficial Mexicana (NOM), por lo cual sus tiraderos a cielo abierto y hasta clandestinos representan focos de contaminación.