Toman receso diputados de Guerrero hasta el 14 de enero de 2025
TIXTLA, Gro. 28 de diciembre de 2014.- Según reporta Milenio, el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, Raúl González Pérez, dijo que solicitó información sobre el caso Iguala a la Secretaría de la Defensa Nacional.
Agregó que el organismo a su cargo investigará todo lo relacionado a la violación de los derechos humanos que exista sobre la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
En la integración del expediente sostuvo que se tomarán en cuenta todos los elementos que existan, aunque declinó hacer algún pronóstico sobre los resultados.
Lo que remarcó en el encuentro, es que CNDH trabaja de mano de los padres en su calidad de víctimas, con la intención de que sientan al organismo que busca recuperar la mística que le dio origen.
“Estamos haciendo la revisión para conocer todo lo que se deprenda por acción y omisión, en su momento haremos los pronunciamientos correspondientes”.
Enfatizó que el caso Iguala-Ayotzinapa es del interés de la CNDH, tan es así que no lo dejó en ninguna visitaduría para que no se diluya, si no que nombró a José Larrieta como titular de una oficina que está encargada exclusivamente en la atención del asunto, para darle la importancia que tiene.
Al reunirse con los padres de los estudiantes en la Normal Rural de Ayotzinapa, sostuvo que lo ocurrido la noche del 26 de septiembre fue un acto de barbarie y que en consecuencia, las manifestaciones pacíficas para reclamar justicia están justificadas.
Los jefes de familia pidieron que se investigue al Ejército y la Policía Federal (PF) por las omisiones cometidas durante los ataques, incluso, reclamaron que en la medida de sus posibilidades promueva el regreso de la fuerza militar hacia sus cuarteles.
Lo que se registró la mañana del domingo fue un reencuentro entre el organismo y la comunidad estudiantil de Ayotzinapa, que la jornada del 10 de octubre decidieron expulsar del plantel al personal que se daba a la tarea de colectar los testimonios de quienes sobrevivieron a los ataques cometidos por la Policía Preventiva de Iguala.
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