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ZIHUATANEJO, Gro., 18 de junio de 2020.- El presidente de Grupo Ixtapa, Agapito Granados Reséndiz manifestó que el sector comercial y restaurantero, ya no aguanta más y verán la forma de abrir sus negocios, con la aplicación de todas las medidas sanitarias que marca la Secretaría de Salud, debido a que no han tenido ayuda ni propuestas del gobierno, lo que ha originado que algunos quiebren.
Entrevistado este jueves, acompañado por el también restaurantero, Cipriano Sánchez Pérez, Granados Reséndiz expresó que durante esta contingencia del Covid 19, han sido abandonados por el gobierno y “queremos abrir nuestros negocios”, por lo que llamó al presidente municipal, Jorge Sánchez Allec para que los ayuden.
“Entendemos por el virus y la enfermedad que aún no pasa, pero también queremos que entiendan que estamos pagando rentas, impuestos, seguro social, infonavit y una serie de gastos que ya no soportamos”, dijo.
Indicó que hay restaurantes muy grandes en Ixtapa y Zihuatanejo que tienen la capacidad para tener sus mesas a una distancia de hasta dos metros, como son Mariscos El Gabo II en la entrada a San José Ixtapa, entre muchos otros.
“Pedimos que vengan y nos verifiquen por parte de la Secretaría de Salud y del Ayuntamiento, y ver cuales cumplen con las condiciones para que pudiéramos abrir, ya que son actualmente unas 700 familias en Grupo Ixtapa que se compone de 282 pequeñas empresas que integra a restaurantes, bares, centros nocturnos, artesanos, farmacias y tiendas de ropa”, expresó.
“Hoy expresamos que ya no aguantamos más, le pedimos también al gobierno federal, que podamos tener algún tipo de créditos porque cuando queramos abrir no tenemos ya dinero para hacer mantenimiento a nuestros negocios debido a que ha habido deterioro por el tiempo que se han mantenido cerrados”, indicó.
Agregó que hace poco les hicieron llegar solicitudes de crédito por parte de gobierno del estado, con una serie de requisitos inalcanzables debido a que como pequeños empresarios, unos no están dados de alta en Hacienda y otros están en buró de crédito.
Por su parte Cipriano Sánchez, dijo que se necesitan mantener las fuentes de empleo para que las familias de los trabajadores puedan seguir comiendo.
“En Zihuatanejo llevamos tres meses cerrados y ya urge que podamos abrir no sólo los restaurantes, porque el turista que viene no sólo viene a comer sino que necesita de otros productos y servicios”.
Reprochó que los enviaron a hacer cuarentena pero no hubo ninguna condonación de servicios como luz, agua o impuestos.