Resalta SEG políticas públicas para educación inclusiva y equitativa
AYUTLA, Gro. 17 de diciembre de 2014.- Integrantes del Movimiento Popular Guerrerense (MPG), estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa y familiares de las 43 víctimas de desaparición forzada se encuentran desde las 15:00 horas exigiendo la salida del Ejército del municipio de Ayutla de los Libres para contribuir con la formación de municipios autónomos en Guerrero, no obstante, El Universal, advierte que por lo menos 300 militares y otros 200 policías estatales se encuentran conteniendo a los indignados con ayuda del cuerpo antimotines.
Por medio de un documentos, “los que suscribimos solicitamos que respeten el libre tránsito y que quiten los retenes de Ayutla ya que violentan nuestros derechos”, dijo Vidulfo Rosales de la organización Tlachinollan y representante de los familiares de los normalistas desaparecidos hace dos meses, quien acompaña a los pobladores de Ayutla en las labores de emplazamiento que, desde las 16:00 horas se tornaron ríspidas (aunque sin llegar a los actos violentos).
Al respecto, Mario Lucio González Cortés, quien se desempeña como comandante de la 27 zona militar, señaló que él no puede recibir el documento y que no está en sus manos dar solución puesto que “o soy el conducto, no les puedo recibir el documento tendrían que hacerlo llegar al gobernador Rogelio Ortega o al Presidente de la República, Enrique Peña Nieto. No estamos aquí por gusto ni por capricho, son órdenes superiores y las acatamos”. En respuesta, Vidulfo Rosales dijo a los militares que tenían media hora para dar una solución.
En entrevista con SDPnoticias Omar García, estudiante de Ayotzinapa, trata de precisar las demandas de la población al estipular que “como se formaron los Consejos municipales ahí, la presencia del Ejército ha sido permanente y la han intensificado, lo cual representa un riesgo. La gente ha decidido que los militares ya no tienen nada que hacer ahí, por eso se les va a invitar a que salgan, porque ya no hay nada que cuidar ahí, la Policía Comunitaria se ha establecido, por lo tanto la seguridad que brinda el Estado, ya no sirve”.
Los indignados, que mantienen tomada la alcaldía de Ayutla desde el pasado 29 de noviembre en un intento por instaurar un consejo ciudadano, increpan en estos momentos a integrantes de la milicia en su cuartel, de manera que un helicóptero sobrevuela la zona a fin de que detectar posibles incidentes. Asimismo, las comunidades de Ayutla han hecho sonar las campanas de los templos regionales como una medida de alerta para los pobladores, misma que ya se percibe tensa.
Con información de SDP Noticias, El Universal, Uriel Sánchez y Alondra Lucatero