Teléfono rojo
Del romance a la acción
A una semana de que Claudia Sheinbaum asumió la presidencia de México, acciones de grupos criminales en diferentes zonas del país, son un claro desafío contra su gobierno y un duro golpe de realidad para recordarle a la autoridad federal quienes son los dueños del territorio.
La mirada romántica de llegar a la silla presidencial se desvaneció en cuestión de días, al exponer ante la presidenta la cruda realidad del poder que tienen grupos criminales.
El hecho más reciente fue el asesinato del alcalde de Chilpancingo, Guerrero Alejandro Arcos Catalán, además del homicidio, su cabeza fue localizada sobre un vehículo al oriente de la capital de ese estado.
La guerra entre carteles no es tema nuevo para Claudia Sheinbaum, por lo que vivió como jefa de la Ciudad de México, al lado de su entonces secretario de seguridad Omar García Harfuch y quien sigue con ella, ahora con el reto de la seguridad nacional.
Recordar también que seis meses antes, cuando Claudia Sheinbaum estaba en campaña presidencial, el convoy de la entonces candidata por Juntos Haremos Historia, fue interceptado por encapuchados en Motozintla, Chiapas, le dijeron ser aliados del gobierno actual y le advirtieron sobre la tensión que había en el lugar, pidiendo que interviniera para evitar lo que sucedió en Comalapa, donde carteles de la droga disputan la plaza y se han registrado desapariciones forzadas masivas, también organizaciones de derechos humanos se han cansado de denunciar la pasividad del ejército mexicano en ese lugar.
La no intervención ordenada a los soldados por sus mandos militares en zonas de alto nivel de conflicto en todo el territorio nacional, sólo les ha traído muerte. Un dato revelador, es que la cifra de militares asesinados fuera de servicio duplica la de soldados caídos en enfrentamientos o en operativos contra grupos criminales, en datos duros los números son alarmantes: Entre diciembre del 2006 y julio del 2024, 820 efectivos han muerto, víctimas de agresiones con arma de fuego o armas blancas, cifra que contrasta con los 403 elementos que perdieron la vida en servicio durante el mismo periodo. (Publicado por N+ vía solicitud de transparencia a SEDENA)
Por otro lado, en Sinaloa, la guerra encarnecida entre los Chapitos y los Mayitos, después de la detención en Estados Unidos de Ismael “Mayo” Zambada, fundador del cartel de Sinaloa, ha abierto las puertas del infierno para los ciudadanos y visitantes de ciudades como Culiacán, en respuesta, el 5 de julio pasado, se reunieron el Gobernador de Sinaloa Rubén Rocha y el Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, cita en la que se refrendó el compromiso del Gobierno federal de ayudar a Sinaloa a restablecer un clima de seguridad, trabajando de forma coordinada las fuerzas locales de seguridad junto con el Ejército Mexicano, la Guardia nacional, la Fuerza Aérea Mexicana y la Marina Armada de México, esperemos que no quede sólo en la fotografía del momento.
Claudia Sheinbaum tiene el gran reto de controlar a los grupos criminales que se apropiaron de municipios y de estados en todo el país, en su discurso de toma de protesta fue clara al señalar que nunca más sucedería una estrategia de combate al narcotráfico como la guerra de Felipe Calderón, pero también está demostrado que la estrategia de abrazos y no balazos falló, su reto es pasar del romance del voto de confianza histórico que le dieron millones de electores a la acción para dar resultados en materia de seguridad.