Desde Catedral cerrada, la misa de Domingo de Ramos en Acapulco

ACAPULCO, Gro., 5 de abril de 2020.- El arzobispo del puerto, Leopoldo González González recordó que las palmas colocadas en la puerta de las casas son “una súplica de protección”, en estos días que la pandemia del Covid 19 genera dolor e incertidumbre.

Durante su mensaje en la homilía transmitido en Facebook Live con motivo del Domingo de Ramos, el prelado católico mencionó que “este año las calles de nuestros pueblos y ciudades están muy solas”, en referencia a la medida de quedarse en casa durante los días de emergencia sanitaria.

“Qué bueno que el Señor nos regala estos días santos cuando la incertidumbre y el dolor ocasionados por esta pandemia nos hacen sentir muy vivamente, nos hacen sentir nuestra fragilidad. Estos días nos ayudarán a mirar dónde está nuestra fortaleza, esa que nos ayuda para cargar nuestra cruz con grande paz y esperanza y nos sostiene más allá de nuestros días”, expresó el jerarca católico.

“En muchas puertas hay una palma o una pequeña rama que aclama al Señor y que al mismo tiempo es un súplica de protección para que no entre ningún mal en el hogar. Esta bendición, lleva el compromiso de que quienes ahí vivimos, tampoco metamos ningún mal”, dijo durante el sermón dictado en la Catedral de Nuestra Señora de la Soledad que permaneció cerrada al público.