Desplazados no retornan por temor a incursiones de grupos armados

CHILPANCINGO, Gro., 26 de diciembre de 2018.- El presidente del Centro Regional de Defensa de Derechos Humanos José María Morelos y Pavón (Centro Morelos), Manuel Olivares Hernández informó que ninguna familia desplazada regresó a sus viviendas en Navidad, e indicó que la condición que ponen las familias para regresar a sus comunidades es el repliegue y desarme de los supuestos grupos de comunitarios que los han asolado.

En entrevista, Olivares Hernández, quien ha dado acompañamiento a los desplazados de la Sierra y de Zitlala, dijo que las familias agraviadas piden que tras el repliegue de los supuestos comunitarios, se instalen perímetros de seguridad que garanticen que no vuelvan a ocurrir incursiones de grupos armados.

Informó que ellos han tenido interlocución con el gobierno federal y les han informado la posibilidad de que la primera quincena de enero de 2019 ya exista una estrategia para todas las comunidades; sostuvo que de su parte han propuesto que se delimiten cinco polígonos de alto riesgo para que sean atendidos como tal, los cuales son: Costa Grande, Acapulco, Chilpancingo, Chilapa y la zona serrana de la entidad.

Indicó que en la zona de Filo de Caballos policías militares relevaron a los soldados que mantenían la vigilancia lo cual, apuntó, es lo mismo pues están capacitados para “la lucha de exterminio” lo cual no es el camino.

Consideró que la estrategia de seguridad en esa zona debe considerar políticas que ataquen las carencias materiales, económicas y sociales que obligan a los jóvenes a incorporarse a grupos delincuenciales, además que debe prever el desarme de los grupos de civiles armados que se autodenominan comunitarios y que se sabe que “son la parte ciudadana de grupos que usan para blindar sus territorios”.