Teléfono rojo
Espartaco: “Volveré y seré millones”
Cuando uno anda en el camino llamado vida, se topa con nombres que han representado mucho y que, sin embargo, a la distancia los acontecimientos se olvidan. Suele pasar más frecuentemente cuando en dichos actos los principales protagonistas son los oprimidos, los que han buscado cambiar su situación y por momentos lo logran. El poder busca enterrar esos recuerdos, esos momentos donde han sido doblegados, buscan que no sean ejemplo, que no sirvan de inspiración.
Espartaco es símbolo de la rebeldía, es el esclavo que se rebeló contra el imperio Romano, pero también el nombre que han tomado, inspirados evidentemente en el gladiador, distintos grupos revolucionarios en el mundo. En México, la Liga Comunista Espartaco, fundada por José Revueltas, y en Alemania la Liga Espartaquista, fundada por Karl Liebknecht, Rosa Luxemburgo, Clara Zetkin entre otros.
Pero, ¿quién fue Espartaco? ¿Por qué se le conoce como quien encabezó la primera gran rebelión de los esclavos contra el imperio más poderoso hasta ese momento, el romano? ¿Es acaso sólo un personaje de películas, de series de televisión? ¿Es acaso el nombre que utiliza un policía para reprimir los movimientos populares y sociales, esos que Espartaco hoy estaría encabezando?
Espartaco había sido adquirido como esclavo en una mina en Egipto. Era un Koruu, termino egipcio utilizado para decir que provenía de “tres generaciones de esclavos”. Era, pues, hijo y nieto de esclavos. De origen Tracio, a pesar de provenir de una mina Egipcia, había sido comprado en Atenas, ya que entre los esclavistas se tenía la leyenda de que los Koruu eran buenos bajo la tierra. Tiempo después fue comprado para convertirlo en gladiador, como diversión de aristócratas y el vulgo romano. Recordemos la famosa frase romana: al pueblo, “poco pan y mucho circo”.
¿Qué aspecto tenía Espartaco? Al estar en la mina, puede uno imaginar un cuerpo lleno de marcas, llagas y cicatrices por los latigazos, pensar en unos pies llenos de callos, una piel quemada por el sol, le faltaría algún dedo, podría ser que tuviera la nariz rota.
Como un hombre esclavizado asume una nueva realidad: no deja de ser esclavo, pero tampoco deja de ser una mercancía que alguien compra para convertirlo ahora en gladiador. Sigue siendo esclavo, sigue sin conocer la libertad. Pero, ¿acaso ahora sufrirá menos? ¿Qué hizo que Espartaco tomara conciencia por él y por los suyos? ¿El consejo de algún anciano, el conocer a Varinia la mujer de su vida, el convivir con otros esclavos convertidos en gladiadores, el ver morir en la arena a otro gladiador que se negó a matarlo? Todo para gozo de alguien que podía pagar por ver morir a hombres, lo cual les causaba diversión.
¿En qué creía Espartaco? ¿En la vida después de la muerte o creía en el hombre, en que no existía una razón para trabajar siendo golpeados por látigos para beneficio de unos cuantos? Se dio cuenta que no había nada que lo rodeara que no hubiera sido construido por ellos, por los esclavos y que si fueron capaces de crear todo lo bello que los rodeaba sería momento también de crear su libertad, tomarla y ponerse a caminar. Fue acaso ahí que la tierra tembló y que el imperio se sintió atemorizado.
¿Cómo manejaba las derrotas el imperio? ¿Qué sintieron cuando se supo que Espartaco y quiénes lo acompañaban vencieron a las seis legiones que habían mandado para sofocar la rebelión, si cada legión la integraban 570 soldados? ¿Cómo un grupo de personas que hasta hace poco tiempo atrás eran esclavos, había logrado vencer a más de 3 mil 500 hombres, soldados romanos bien alimentados y entrenados? ¿Qué le dijo Espartaco al soldado que mandó como mensajero, no sólo con la voz suya sino con los sueños de los que lo acompañaban? ¿Acaso que no estaban dispuestos a seguir aguantando golpes y humillaciones? ¿Cómo es que sobrevivió cuatro años al poder de Roma y demostró que es posible una realidad distinta a la que vivían quienes hasta hace poco eran dueños de nada?
¿Qué es lo que no nos han contado las películas o series, cómo ese nombre puede ser mote de guerra para alguien que en su tiempo sería miembro de una legión romana y que de haberlo enfrentado, sin duda, Espartaco lo hubiera vencido? En todo caso debiera llamarse Cayo Craso, quien siempre busco minarlo.
Para una mejor aproximación a la vida de Espartaco, existen tres trabajos distintos muy interesantes sobre él. Uno escrito por Howard Fast llamado Espartaco, que se puede descargar del sitio de la Brigada Para Leer En Libertad A.C., proyecto dedicado al fomento y promoción de la lectura en México, http://brigadaparaleerenlibertad.com/programas/espartaco/
Existe también un par de películas muy buenas, ambas basadas en la novela de Howard Fast. Está la que es protagonizada en 1960 por Kirk Douglas (recientemente fallecido) y la otra, una especie de miniserie que termina siendo película protagonizada por Goran Višnjić en 2004. Si buscamos ambas películas por internet aparecen disponibles para verse.
“Levantaos y ser libres”, dijo Espartaco en algún momento. Me gusta más la versión donde dijo, en la antesala de la derrota o acaso de su muerte: “Volveré y seré millones”.