Corrupción neoliberal
Las opciones de PRD y PAN para el 2021
Uno de los protagonistas de las muy complicadas elecciones de 2021 en Guerrero volverá a ser, sin duda el Partido de la Revolución Democrática, cuya lucha por la reivindicación de los derechos sociales y su larga tradición de izquierda opositora, lo mantiene arraigado entre las preferencias políticas de buena parte del electorado estatal, aunque su debacle nacional sea evidente.
Los resultados de los comicios de 2018 fueron sin duda un duro golpe para el perredismo, que como la mayoría de los demás partidos fueron literalmente arrollados por Morena. Sólo hay que referir que la fracción perredista como tal acaba de desaparecer en el Senado y en la Cámara de Diputados cuentan acaso con once legisladores, es decir, con casi nada.
No obstante, en algunos estados como Guerrero, el perredismo no sólo ha sobrevivido, sino incluso últimamente se ha fortalecido debido a los constantes desatinos de Morena en el ejercicio en el poder federal y la lamentable actuación que muchos diputados morenistas han tenido en el congreso local.
Ha sido evidente que, en medio de la crisis que arrastra, que pasa incluso hasta por el tema financiero porque es un partido prácticamente en quiebra, el PRD tampoco ha sido capaz de reinventarse a nivel nacional y las promesas de renovación y reconversión a fondo, no pasaron de eso.
A pesar de ello, no dudo que para el próximo año sean protagonistas quizá decisivos del curso que eventualmente pueda tomar la renovación del Ejecutivo local en Guerrero, porque siguen teniendo fuerza y presencia en prácticamente todo el estado, aunque mantengan su esquema histórico de las famosas corrientes y grupos, que dicen que no existen, pero sí existen.
Desde luego que hay en el perredismo quienes buscan la candidatura a la gubernatura, entre los más visibles hay que anotar a Carlos Reyes Torres, Evodio Velázquez Aguirre y Bernardo Ortega Jiménez. Los tres con trayectoria y conocimiento entre los ciudadanos. Ninguno de los tres batallaría mucho para posicionarse.
Otra opción política en Guerrero, que también tiene presencia en algunas regiones, es el Partido Acción Nacional, instituto político que ha vivido mejores tiempos y que vino a menos por las atroces pugnas internas que lo han dividido. No dudo que por ejemplo, Marcos Efrén Parra Gómez, el actual alcalde taxqueño; Guadalupe González Suástegui, diputada ante la 62 legislatura, e incluso Eloy Salmerón Díaz, el líder estatal blanquiazul tengan interés por la candidatura.
Aquí el punto es que, todas estas opciones opositoras que he estado comentando recientemente, sólo tienen una posibilidad real de triunfo, reitero, si son capaces de aliarse. Si no hay alianza, deben hacerse a la idea de que hay que irle abriendo desde ahora la puerta de Casa Guerrero a quien postule Morena, sea quien sea.