Teléfono rojo
Solucione algún problema de la humanidad con su PC
Hay gente común, como usted o yo, que carecemos de conocimiento científico, pero creemos que la ciencia es una vía para mejorar la existencia de todos en este planeta y ciertamente nos gustaría ser parte de esto, pero nuestra falta de preparación científica de alto nivel nos lo impide.
En la actualidad, las diversas disciplinas científicas han llevado sus investigaciones a hasta obtener información que nos asombra por su trascendencia y profundidad, ejemplo de esto son los experimentos subatómicos, o los genéticos o los bioquímicos; aunque requieran investigar mucho más para que los resultados se apliquen a la vida cotidiana de las personas.
La investigación actual no siempre se realiza en los laboratorios que imaginamos: con probetas, gigantescos y complejos aparatos electrónicos, poderosos microscopios y todo lo que imaginamos los profanos; mucha de esta investigación se realiza en centros de cómputo de gran potencia, capaces de procesar enormes cantidades de datos provenientes de esos laboratorios que imaginamos. Sin embargo, aun utilizando las más poderosas supercomputadoras convencionales que la tecnología ha logrado desarrollar hasta ahora, se necesitarían décadas o incluso siglos de procesamiento para ordenar y dar sentido a los enormes volúmenes de datos que se deben procesar para ofrecer resultados tangibles.
Para solucionar este problema, hace por lo menos dos décadas, los científicos idearon una forma sumamente práctica para acceder al enorme, o casi “ilimitado” poder de cómputo que representarían juntas las computadoras personales, la suya o la mía, la de casa o la de la oficina, la de la escuela, etcétera, conectadas por internet y aportando su potencia para procesar una pequeña porción de esa enorme cantidad de información que obtienen los científicos.
Así, crearon un programa, muy pequeño y sencillo, para distribuirlo de forma mundial y gratuitamente entre ciudadanos, empresas, instituciones o cualquier otro que de forma voluntaria accediera a recibir un paquete de información, vía internet y permitiera que su o sus computadoras se dieran a la tarea de procesar la información recibida y la enviasen de regreso cuando terminen de procesarla; entonces recibir un nuevo paquete de información “cruda” y procesarlo, regresarlo y así, hasta que el dueño de esa pc abandone ese voluntariado.
Todo este trabajo lo hace la PC durante los tiempos muertos, es decir, cuando está activo el protector de pantalla o el usuario se aleja de la máquina durante un tiempo predeterminado y cuando el operario de la PC retoma lo que estaba haciendo, así como se detiene el protector de pantalla que tenemos personalizado y regresa al programa que se estaba usando antes de dejar la computadora, el programa de los investigadores se detiene y deja libres los recursos del sistema que estaba ocupando, como la memoria RAM, por ejemplo.
Personalmente ofrecí mi computadora voluntariamente hace como 20 años, al Proyecto SETI, acrónimo del inglés “Search for Extra Terrestrial Intelligence” o Búsqueda de Inteligencia Extraterrestre, en español, que buscaba vida alienígena usando el radiotelescopio de Arecibo, en Puerto Rico, asentado en un enorme cráter que funge como base para una antena parabólica que detecta señales de radio extremadamente débiles, que pudiesen haber sido emitidas a miles o millones de años luz de distancia, por alguna inteligencia lo suficientemente desarrollada que habitase un planeta ubicado en otro sistema solar. Lamentablemente, a 20 años del surgimiento de SETI, el programa fue “suspendido temporalmente”, sin haber localizado ninguna inteligencia alienígena, aunque si hubo una falsa alarma que abrió un cúmulo de esperanzas, las cuales fueron abatidas por científicos rusos que demostraron que se trataba de ruido terrestre y no de mensajes interestelares.
Esta forma de colaboración voluntaria se aplica actualmente en muy diversos problemas o investigaciones científicas, pero mayormente con las relacionadas a enfermedades como cáncer, Alzheimer y otras que afectan comúnmente a las personas, como el Covid 19, que ha unificado a enormes cantidades de usuarios, ubicados en casi todo el mundo, ofreciendo sus computadoras para investigar la “enfermedad del 2020” o tal vez del Siglo 21.
Si usted, voluntarioso lector, desea colaborar con alguno de los muchos problemas que requieren la participación de su PC para agilizar su solución, solo ingrese a la siguiente URL: https://foldingathome.org/ e inscríbase, busque el proyecto que más le acomode: cáncer de mama, de riñón, Alzheimer u otro y descargue en unos segundos el programita, instálelo, seleccione la forma de trabajo, siempre o solo tiempos muertos y adelante, usted estará participando activamente en la solución de alguno de los grandes problemas de la humanidad. ¡Excelente, Felicidades!
POSIBLE REGRESO DE LOS ARQUEROS A SUS CAMPOS DE TIRO
Una noticia se regó con gran alegría entre los arqueros guerrerenses al inicio de esta semana: El Instituto del Deporte de Guerrero, Indeg, confirmó que, por ser una práctica de bajo riesgo biológico, el Tiro con Arco podría reiniciar actividades próximamente, en los 5 municipio de Guerrero donde se practica: Acapulco, Chilapa, Chilpancingo, Iguala y Taxco.
Esto será posible, porque el deporte de las saetas no conlleva contacto físico y puede realizarse bajo las medidas de protección biológica recomendadas por la Organización Mundial de la Salud, OMS, como lo son: el uso de cubrebocas en todo momento desde que llega al campo de tiro; lavarse las manos y usar gel antiviral antes y después de la práctica y utilizar guantes de plástico desechables durante todo el desarrollo de la actividad; efectuar limpieza y desinfección de equipos y materiales antes y después de cada práctica; llevar agua suficiente para consumo exclusivo de cada deportista y sin compartir el líquido, así como una toalla que deberá utilizarse para cubrir boca y nariz en caso de toser o estornudar; mantener una distancia mínima de dos metros entre los arqueros y entre éstos y sus entrenadores, quienes darán las indicaciones necesarias respetando esa distancia mínima; demás, se verificar la temperatura de cada deportista al arribar al campo de tiro, se evitarán saludos de mano y abrazos y se impedirán reuniones sociales dentro o fuera de las instalaciones deportivas.
Faltan por confirmar los nuevos horarios de práctica, sobre todo en cada municipio, pues las actividades deberán combinarse con otros deportes que también se realizarán simultáneamente, siguiendo las reglas de seguridad biológica antes enunciadas. El reto es de disciplina y recae sobre el presidente de la
¡Enhorabuena flechadores!