Foro político

Analítico y prudente ha sido el mensaje del diputado y Presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Congreso Local, Jesús Eugenio Uriòstegui García, con llamados a la mesura no sólo a la bancada morenista que lidera, sino a toda la militancia, ante el áspero debate que provoca la Iniciativa de Ley Anti nepotismo y Anti reelección. Muchos, ya se desbordaron.

El titular de la Jucopo, se ha pronunciado a favor de la gobernabilidad; es decir, evitar el golpeteo político entre la militancia morenista. Los golpes bajos y los ajustes de cuentas entre militantes de Morena, podrían debilitar a ese partido y afectar la gobernanza en Guerrero y hasta a la mandataria estatal, Evelyn Salgado Pineda.

Pareciera que la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, le propinó un varazo al panal, porque alborotó al avispero; incluso, ya se formaron dos y hasta tres bandos políticos que también metieron el acelerador de la sucesión gubernamental del 2027. Se calentaron muy rápido los ánimos; no era para menos.

Ante tal escenario, donde varios actores  sacaron sus fierros para la batalla política, el citado legislador Uriòstegui García, los llama a la calma mediante exhortos para evitar afectar la buena marcha de la actual Legislatura de Guerrero.

Se trata, se insiste, evitar algún enfrentamiento entre legisladores de la misma bancada morenista. Hasta ahora, Uriòstegui García lleva bien el control político, y es importante factor de unidad al seno del Congreso Local.

La iniciativa de reforma enviada por la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo -Anti nepotismo y Anti reelección-  una gran mayoría la considera altamente positiva, porque oxigena y moderniza la política nacional; pero tampoco tiene nombre ni apellidos, consideró el titular de la Jucopo.

Así, Uriòstegui García, refrenda su postura en el sentido de que cuando sea votada la Ley Anti nepotismo y Anti reelección, buscará el consenso entre sus compañeros de bancada morenista, para lograr un acuerdo mayoritario.

De ser así, el legislador y líder cameral se colocaría como un político institucional que se conduce con prudencia, capacidad de análisis y visión de miras en la conducción del Poder Legislativo. Ir en contra de la citada Ley, sería declararse en rebeldía, contrario al Congreso de la Unión y a lo dictado desde Palacio Nacional. Esa, no sería la ruta del diputado Presidente de la Jucopo.

Jesús Eugenio Uriòstegui García, es un joven político -originario de Chilpancingo-, visionario y con futuro promisorio; sabe que  hoy no son tiempos de subir al ring, para pelear contra algún enemigo real o ficticio; y aquellos actores que adelantaron y calentaron la sucesión 2027, lo hacen movidos por su desmedida ambición personal.

ENTRAR AL MORENA: EL GRAN OBJETIVO.

Hace más de 30 años, miembros del PRI, gente con y sin partido, hacían hasta lo imposible por incorporarse al PRD, para agarrar hueso; el sol azteca, era el gran atractivo.

Hoy, pareciera que ese partido está apestado. Ni por chiste la ciudadanía se afilia al perredismo, va en caída libre, rumbo a su desaparición.

Quien se agandallò la dirigencia perredista es Evodio Velázquez, con inusitada voracidad y, con un  fin: apropiarse de una diputación plurinominal, o para su consorte. Es su desmedida ambición, porque en Morena lo repudian.

Ese mismo fenómeno ocurre ahora: muchos perredistas y priistas, más gente sin partido, pretenden meterse al Morena, para ver qué hueso agarran, de cara al 2027.

Lo malo es que ciertos dirigentes locales de Morena, ya son prepotentes y se sienten dueños de ese partido, creación del ex presidente AMLO, quien se encuentra operando políticamente su maximato, a control remoto, desde La Chingada (así se llama su rancho de Tabasco).

Esos líderes venales del Morena, ni debieran sentirse caciques de ese partido, y menos linchar públicamente a políticos ex priistas y de otros institutos, porque -recuérdese- su gurú AMLO, también proviene de las filas del tricolor.

Ex gobernadores de la era del PRI, panistas, perredistas y otras rémoras quienes ya fueron purificados por el falso Mesías, ahora se desgarran vestiduras y hasta les han dado buenos huesos, como cónsules, aunque la DEA ahora los señale como narco-políticos.