El agua, un derecho del pueblo
Adela: ¿le quieren imponer gabinete?
Viene le etapa crucial el próximo día 30 del mes en curso: La toma de protesta e instalación de los 81 ayuntamientos de Guerrero, en condiciones de cierta crisis política, con espiral de violencia, la desaparición de un alcalde electo -Daniel Esteban González, de Cochoapa el Grande-, y hasta amenazas de supuestos poderes fácticos hacia las autoridades -electas- de Acapulco.
Quien ha resistido un alud de críticas de todos calibres es la alcaldesa de Acapulco, Adela Román Ocampo, tras su inobjetable triunfo y por el efecto AMLO.
A través de las redes sociales, la munícipe de Morena del puerto, ha recibido todo tipo de señalamientos, pero más negativos porque en su futuro gabinete no incluyó a varios miembros del partido que la llevó al poder (Morena); pero ella está en todo su derecho de nominar a quien le parezca con mejor perfil para cubrir espacios de su gabinete. Será ella quien se equivoque o acierte.
Es el mismo caso del presidente electo AMLO, quien incluyó dentro de su gabinete a personajes del viejo PRI como el siniestro ex titular de Gobernación Manuel Bartlett Díaz, responsable de la caída del sistema que hizo ganar la presidencia de la República a Carlos Salinas de Gortari, arrebatándole la silla presidencial a Cuauhtémoc Cárdenas (1988).
A la alcaldesa del puerto la han criticado porque es resguardada su seguridad por una escolta de guardias privados y soldados de la Marina.
La presidenta electa gobernará uno de los municipios más violentos del país donde diariamente hay un promedio de media decena de ejecutados de manera dolosa y actúan grupos del crimen. No será alcaldesa de Disneylandia.
A varios críticos gratuitos de la abogada Román Ocampo, tampoco les gustó que se haya reunido con el gobernador Héctor Astudillo Flores, con quien tendrá que coordinarse en diversas tareas sobre todo en temas de turismo, seguridad, servicios e inversiones. Ni el mandatario estatal ni la alcaldesa electa son sectarios; son dos autoridades plurales en el estricto sentido político.
En las últimas horas, la Síndica Municipal electa Leticia Castro Ortiz fue sido amenazada de muerte, tras advertirle que no se presentara a tomar protesta ni asumir el cargo “porque sería recibida a balazos”.
“Muy grave la amenaza”, así fue calificada por el diputado local y presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Congreso Local, Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros y llamó a su partido -Morena- a implementar una estrategia conjunta para impedir ese tipo de situaciones, agresiones o amenazas.
Son tantos los intereses económicos, políticos y financieros en Acapulco, que las presiones arreciaron desde el momento mismo en que la ex magistrada Román Ocampo, se convirtió en la primera mujer en ganar una elección democrática y convertirse en alcaldesa (electa) por el partido Morena. Las presiones continúan, pero éstas peligrosamente se convierten en amenazas.
Quien anda más preocupado porque la alcaldesa -electa- Román Ocampo no le rasque a los números ni a las cuentas para descubrir el enorme boquete financiero en las arcas municipales, es el todavía munícipe del puerto Evodio Velázquez Aguirre, quien ya arrastra una pésima fama como corrupto, casi similar al ex gobernador de la era priista, Javier Duarte, de Veracruz.
Llama la atención lo que también dijo el “secretario general” de Morena Marcial Rodríguez Saldaña, quien responsabiliza al alcalde Evodio Velázquez Aguirre “de cualquier agresión que sufra algún integrante del comité de entrega-recepción”.
Marcial, no lo dice, pero lo interpreta: Que Evodio no pone orden en la Secretaría de Seguridad Pública, y que podría NO estar facilitando el proceso de entrega-recepción.
A pesar de que la Joya de la Corona –Acapulco- está en banca rota por el corrupto y fallido gobierno que aún encabeza el perredista Evodio Velázquez, sin duda que la alcaldesa electa Román Ocampo, ha logrado sortear difíciles escollos en su camino hacia el palacio municipal; en medio de grandes presiones no solo de fuerzas externas sino internas, que pretenden imponerle gabinete al gusto; hasta los poderes fácticos aspiran al control de Acapulco.
Sin embargo, la abogada conoce bien el terreno que pisa, pues a partir del 1 de octubre -cuando asuma el cargo-, será otro el escenario que enfrente.
Con el amplio respaldo del presidente electo AMLO, y del gobernador Héctor Astudillo Flores, el gobierno municipal que encabece la abogada Adela Román Ocampo, logrará tal fortaleza para darle certidumbre al pueblo de Acapulco, que clama más por dos -de varias demandas-: Seguridad y servicios públicos eficientes… Punto… [email protected]