
Teléfono rojo
Alistan cárcel y multas para líderes y autoridades que fomenten invasiones en zonas de alto riesgo
La laguna de Tres Palos es ya una fosa séptica: colonos
Los de Diamante exigen separarse de Acapulco por nula atención del municipio
Para llevar a la cárcel a invasores, sus líderes y autoridades que fomenten las ocupaciones en zonas de alto riesgo en ciudades como Acapulco y Chilpancingo, el Congreso de Guerrero, alista reformas y adiciones a tres artículos del Código Penal del Estado y la Ley de Asentamientos Humanos, Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano de Guerrero que pretende imponer ligeras penas que van de tres a seis años de prisión y multas de 500 a 1000 veces la Unidad de Medida y Actualización vigente (UMA) que cada unidad equivale aproximadamente a menos de un día de salario mínimo.
Las sanciones planteadas son mínimas ante el negocio altamente lucrativo y de capitalización política que representa la invasión de terrenos privados, abandonados, o de alto valor ambiental como es el Parque Nacional El Veladero y los cuerpos lagunares y de manglares como ha ocurrido en la zona Diamante de Acapulco.
La nueva ley de ser aprobada advierte las sanciones con cárcel y multa a quien promuevan la invasión, lotifique, venda, se asiente o construya en zonas de alto riesgo, esto incluye a autoridades corruptas que aprueben o actúen en complicidad, así como los técnicos y funcionarios que realice estudios y el cambio de suelo sin precisar el riesgo como son las zonas cercanas a causes de ríos o barrancas, áreas inundables o escarpadas en cerros.
Acapulco ha sufrido la urbanización sin planificación urbana con invasiones constantes al Parque Nacional El Veladero, precaristas asentados en los causes de arroyos, barrancas y ríos, además del relleno y urbanización de las zonas de manglar en las Lagunas de Puerto Marqués y Tres Palos, mientras que los desarrolladores se han
enfocado en desecar la laguna de Coyuca de Benítez, incendiando sus manglares con la toleranacia de la autoridad, un problema que se puede detener pero hasta ahora no hay voluntad política.
“Hoy Acapulco está mejor que como estaba antes del (huracán) Otis”, afirmó la presidente Claudia Sheinbaum en su última visita el pasado domingo al hospital Vicente Guerrero del IMSS donde prescindió de la anfitriona autoridad municipal encabezada por Abelina López.
Mientras que para la Federación, Acapulco ya está recuperado, los huracanes Otis y John, en 2023 y 2024, destrueron más de 2 millones de árboles en el Parque Nacional El Veladero, poniendo al descubierto cientos de casas improvisadas sin drenajes, sin servicios públicos, pero quién los llevó ahí y quién los ha tolerado.
En las zonas de humedales del Acapulco Diamante, cada temporada de lluvias pone el alto riesgo unos 236 mil 986 habitantes pues varias urbanizaciones fueron construidas sobre el humedal, manglares, terrenos ganados a la laguna de Tres Palos, así como a las márgenes del río de La Sabana.
En enero pasado, 65 comisarios y representantes del mismo número de colonias y pueblos del Acapulco Diamante solicitaron al Congreso del Estado separarse de este municipio turístico y formar una nueva municipalidad acusando el abandono y falta de interés del gobierno municipal para instalar plantas de tratamiento de aguas residuales que contaminan la laguna de Tres Palos la que se ha convertido según ellos en una gran fosa séptica por la gran cantidad de descargas domiciliarias, de rastros tolerados, condominios, hoteles y negocias que vierten sus aguas contaminantes al río de La Sabana y la laguna de Tres Palos.
El periódico El Sur publicó una nota en enero de este 2025 sobre las denuncias de vecinos de la zona Diamante, entre ellos, pescadores de Tres Palos y acusaron a condominios y hoteles de la zona Diamante de verter sus aguas residuales al humedal.
Y agregaron un dato grave y revelador, que con la autorización gubernamental, se urbaniza y construyen 14 mil nuevas viviendas de las cuales el 50 por ciento ya están concluidas y todo ese drenaje irá a la laguna de Tres Palos que ha menguado la producción pesquera de la que ellos dependen. ¿Quién autorizó ese nuevo desarrollo inmobiliario? ¿Es zona inundable?
Las sanciones contra los invasores de zonas de alto riesgo debe ser mayor y retroactiva pues ex alcaldes y ex regidores, así como ex funcionarios ambientales favorecieron a consorcios constructores en la zona Diamante afectando la calidad de vida de acapulqueños y turistas y generando gastos multimillonarios para atender emergencias y recuperaciones en zonas de alto riesgo e inundables en Acapulco.
La afectación generada por líderes y políticos en Acapulco con invasiones de precaristas se ve reflejado en la contaminación de nuestras playas, la invasión del Parque Nacional El Veladero, creando zonas marginadas sin servicios básicos provocando además la pérdida de biodiversidad, y sobre todo la violación a los derechos humanos de vivir en un ambiente sano al que todos tenemos derecho.
Las preguntas de hoy:
La presidenta Claudia Sheinbaum al momento no ha anunciado los avances en la recuperación de 21 plantas de tratamiento de aguas residuales. ¿Cuándo quedará listas?
Acapulco entró en el espiral del declive, ¿el segundo piso de la transformación ayudará al puerto a sacarlo o lo hundirá aún más?