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IGUALA, Gro. 23 de febrero de 2021.- El estado de Guerrero es rico en tradiciones. La muñeca (Guentli, en náhuatl) es una de estas que solo se realiza en la comunidad de Chilacachapa, perteneciente al municipio de Cuetzala del Progreso, en la zona Norte de Guerrero.
El significado de esta comunidad es “lugar donde se asentaron las langostas”. Se dice que es un pueblo de origen chontal y que fue fundado hace alrededor de 200 años.
Blanca Ximena Carranza, originaria de esta comunidad, explicó que esta tradición de la muñeca se dice que tiene alrededor de 100 años y está relacionada con la petición de mano.
Es un ritual previo a la boda en el que participan no solo los familiares, sino buena parte de la comunidad.
Guentli, como se dice en náhuatl, es una muñeca hecha en pan artesanal de más de un metro.
Los abuelos cuentan que la muñeca solo se les podía dar a las señoritas que eran pedidas para matrimonio. Los padres del novio tenían que ir a pedir la mano de la joven, y en ocasiones tenían que ir varias veces hasta que los padres de la joven aprobaran la unión. Podrían pasar varios años pidiendo a la joven.
Una vez que los padres de la joven aceptaban, los familiares del novio llevan diversos obsequios a la familia de la novia. Estos obsequios son canastos que contienen desde frijol, azúcar, chocolate y bebida, además de la muñeca que es para la novia. Esta muñeca es una pieza de pan artesanal de aproximadamente un metro.
La muñeca es colocada en una tabla y junto a esta se colocan los obsequios de los padrinos de bautizo y confirmación del novio, así como de sus tíos y otros familiares. Son, de hecho, tres muñecas las que se entregan a la novia y estas llevan desde ropa, vestido, zapatos, joyería de oro y plata y otros accesorios que son para la novia. Cada uno de los obsequios lleva el nombre de quien lo donó.
Estos obsequios son entregados a la novia y a su familia el día acordado entre los padres de la novia y el novio y en este ritual participan el novio, sus padres y familiares, así como invitados.
Llegado el día acordado por ambas familias se llevan los obsequios realizando un recorrido que parte de la casa del novio.
El novio encabeza este acto montado en un caballo y jalando un toro que lleva en los cuernos dinero.
Detrás del novio van sus invitados o familiares cargando en la cabeza las muñecas y los canastos con obsequios para la familia de la novia. La música de viento acompaña todo este recorrido, que finaliza al llegar a la casa de la novia.
Esta y sus padres salían al encuentro del novio y sus familiares y la joven retiraba el dinero de los cuernos del toro que después sería sacrificado para preparar los alimentos de la fiesta.
En la actualidad los toritos que encabezan el recorrido son de barro y contienen mezcal para la familia de la novia. Quienes llevan los toritos durante el recorrido realizan travesuras entre los participantes de esta celebración de compromiso de matrimonio. Las mujeres con algún paliacate o rebozo torean a los toritos que bailan al ritmo de la música de viento que compaña en todo el recorrido.
La comida la da la familia de la novia y la familia del novio lleva bebida, refrescos y cerveza para todos los invitados.
Al día siguiente, por la mañana o a la hora acordada por ambas familias, se parten las muñecas de pan artesanal a las que ya se les ha quitado la ropa y demás obsequios para la novia. Cada prenda tiene el nombre de la persona que la donó.
Después de esto se realiza la boda en la fecha acordada por ambas familias.
Chilacachapa es una comunidad con muchas festividades y tradiciones que no se realizan en otras partes del estado de Guerrero.