
Participa Semaren Guerrero como jurado en concurso de videos ambientales
CHILPANCINGO, Gro., 26 de abril de 2019.- Habitantes de la sierra de Guerrero expusieron ante el delegado del gobierno federal Pablo Amílcar Sandoval Ballesteros, la crisis que enfrentan por el abaratamiento de la goma de opio y la falta de alimentos, y rechazaron que haya atención al respecto y que se cuente con el apoyo de programas sociales, como ha afirmado el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Este viernes los organizadores de los foros por la Pacificación y reconciliación de Guerrero entregaron sus conclusiones al delegado, con la asistencia de habitantes de la sierra y de los diputados integrantes de la Comisión Especial de la Regionalización de la Sierra, Servando de Jesús Salgado Guzmán y Adalid Pérez Galeana, ambos de Morena.
Sara Hernández Urióstegui, habitante de Plan Verde, San Miguel Totolapan, expresó que se deben tomar acciones inmediatas para atender a la sierra, pues atraviesa un momento en el que necesita que los servidores públicos trabajen en campo y no en escritorio. Aseguró que su situación es peor que en La Montaña.
“Los sierreños no somos malos, nos han etiquetado de una mala manera, somos campesinos que no hemos tenido la oportunidad de otras alternativas, pero en realidad no somos malos, se nos ha etiquetado que es diferente, somos gente trabajadora, no somos gente floja”, dijo.
El habitante de Vallecitos de Zaragoza, Zihuatanejo e integrante del Comité Técnico de la Comisión Especial, Pedro Quiroz Basurto, desmintió al presidente López Obrador, quien dijo que ya se atiende el problema de la sierra.
“La situación de la sierra es verdaderamente grave, no solamente para la sierra o para el estado de Guerrero, es un problema del país porque si bien es cierto hay cosas muy buenas como su gente y lo que se puede hacer de desarrollo, pero no hay condiciones, no hay respaldo, no ha llegado el apoyo”, expresó.
Consideró que es preocupante “que no se atiene” al nuevo gobierno porque este apunta a regresar al pasado; reveló que la semana pasada cuatro familias tuvieron que salir de su comunidad porque su situación es difícil.
Susana Lucho Texpa, quien viajó 12 horas para llegar desde Filo Mayor, indicó que no piden que les den todo, sólo apoyo para salir adelante pues ellos también trabajan; dijo que están fichados como amapoleros, pero que eso ya se acabó y ahora no saben de qué va a vivir.
Modesto Rauda Wences, del ejido Río Frío de los Fresnos, Coyuca de Catalán, apuntó que al estar enclavados en la sierra no viajan a su municipio, sino a Petatlán, y que dese hace seis meses por esos caminos se ha impedido el paso a alimentos, situación que ya denunciaron, pero no les han hecho caso.
Consideró que se ha minimizado a la sierra a pesar de ser la tercera parte del territorio, reprochó que los gobernantes no quieren saber nada de esa región y advirtió que si se niega la atención, la Costa Grande, Tierra Caliente y Chilpancingo no tendrán agua por la deforestación que también se sufre.
Llamó a quienes han empezado a trabajar por esa zona a que no bajen la guardia porque hay mucho por hacer, y dijo que no tienen esperanza de que los empadronen en los programas del gobierno federal, pues nunca los censaron.