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ACAPULCO, Gro., 29 de marzo de 2017.- Efectivos del Ejército Mexicano cumplieron el sueño de Antonio Vargas Santos, un niño con cáncer, que se convirtió en soldado honorario por un día.
La mañana de este miércoles, en las instalaciones del 68 Batallón de Infantería, ubicado en Pie de la Cuesta, el niño igualteco, hijo de jornaleros en Sinaloa, que lleva aproximadamente tres años luchando contra la leucemia, acudió a un desayuno acompañado de su abuelita Dominga López Sánchez.
Los soldados uniformaron al niño para así concretar su ilusión, liberaron tortugas en el mar y además se realizó un desfile en su honor. La ceremonia protocolaria fue presidida por el mayor, Gibrán Jalil Díaz del Castillo Méndez.
En entrevista, Antonio prometió no rendirse y luchar por completo para vencer su enfermedad.