Piden inclusión de nombres indígenas en actas de nacimiento de Guerrero
ACAPULCO, Gro., 5 de julio de 2019.- El ex presidente Felipe Calderón Hinojosa y el ex gobernador Ángel Aguirre Rivero volvieron a intercambiar acusaciones este viernes, respecto a la presunta negación del antes perredista a despedir a los policías que no aprobaron los exámenes de control y confianza.
En entrevista esta mañana con Ciro Gómez Leyva en su espacio en Radio Fórmula, el ex panista defendió la estrategia de seguridad aplicada durante su gobierno y dijo que esta funcionó donde hubo cooperación local, en referencia a las administraciones estatales y municipales, y citó como ejemplo al estado de Guerrero, como uno de los que no coadyuvó.
“En Guerrero hacían control de confianza y no cambiaban a los policías, ve cómo esta la situación en Guerrero. En Acapulco sabíamos que los policías municipales, una gran mayoría trabajaron con los criminales, no los quisieron reemplazar. Aguirre decía ‘el presidente, con todo respeto, quiere que México sea de primer mundo, pero no somos primer mundo, somos país pobre’. Para mejorar los turistas en Acapulco, en lugar de cambiar a la policía, trajeron a Sophia Loren, pues sí muy padre, pero eso no arregla el tema de seguridad”, expresó.
Y agregó: “Por cierto, esos policías que nunca quisieron cambiar en Guerrero fueron los que secuestraron y probablemente mataron a los estudiantes de Ayotzinapa”.
El ex perredista le respondió a través de su cuenta de Twitter, donde lo acusó de mentir nuevamente y le exigió presentar pruebas de que él se negó a dar de baja a los policías que no pasaron las evaluaciones.
Asimismo señaló que Calderón “busca a toda costa ser visto. Seguramente busca llenar un vacío existencial, pero el problema lo tiene en su interior por causas de todos conocidas”.
Indicó que el ex mandatario “ha ofrecido al nuevo gobierno sus servicios y ‘experiencias’ que fueron las más desastrosas en la historia del país, cuando lo único que puede enseñar son torpezas y autoritarismo”, y aseguró que en Guerrero se le recuerda “como el peor presidente en toda nuestra historia”.
Además criticó su intención de crear un nuevo partido, proyecto que calificó como “el peor de los fracasos”, y consideró que “antes de buscar el apoyo de los mexicanos para su aventura política”, tendría que ofrecerles disculpas.