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CHILPANCINGO, Gro., 31 mayo de 2017.- En Guerrero prevalece un alto descontento social y desconfianza en las autoridades, que lleva a los ciudadanos a validar la justicia por propia mano, la pena de muerte para delincuentes y a preferir un gobierno autoritario en lugar de uno democrático.
Así lo concluye la investigación titulada La Calidad de la Ciudadanía en Guerrero, realizada por el Instituto Internacional de Estudios Políticos Avanzados Ignacio Manuel Altamirano (IIEPA-IMA) de la Universidad Autónoma de Guerrero (Uagro), en coordinación con el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana (IEPC).
El informe fue presentado esta mañana en el auditorio de Rectoría de la Uagro, donde el coordinador de la investigación y director del IIEPA-IMA, Raúl Fernández Gómez explicó que dicho estudio se realizó en 25 municipios de las siete regiones del estado, a través de cuestionarios aplicados ciudadanos, bajo un ambiente de inseguridad debido a que en Acapulco, Iguala y Atoyac los encuestadores enfrentaron incidentes de violencia.
Los resultados de la investigación, dijo Fernández Gómez, muestran el descontento social, así como las propias formas de organización social de la ciudadanía, ante los pocos resultados de las denuncias que se interponen en dependencias encargadas de impartir justicia.
Explicó que en la región Acapulco existe alta desconfianza en la policía para investigar los casos de violencia. Además que registra una baja participación electoral, no sólo por la violencia, sino porque los ciudadanos no confían en los políticos y prefieren un gobierno autoritario a uno democrático.
En la región Centro prevalece el robo con violencia y la extorsión, además de que la gente tiene una percepción que la ley se debe cumplir y es la única zona donde existe mayor tolerancia a las ideologías políticas y religiosas, así como la única donde la gente todavía cree en los políticos.
En el caso de la región Norte, los ciudadanos también consideran que las leyes deben cumplirse, pero en esta zona la gente considera viable la ley del castigo, es decir que un delincuente debe ser asesinado y no encarcelado porque volverá a cometer el mismo delito. Aquí también prevalece la organización para manifestaciones y bloqueos.
En la Costa Chica prevalece un ambiente de que se debe ejercer justicia por propia mano, ante la ineptitud de las autoridades. En esta zona también prevalece la organización para manifestaciones y destaca la alta participación de las mujeres en los procesos electorales.
La gente de la Costa Grande destaca por ser más altruista y con mayor circulación de información política, a través de las redes sociales.
En la región de La Montaña, la más pobre de Guerrero, destaca que la gente considera que las leyes deben ser cumplidas, existe mayor organización para manifestaciones y bloqueos, acciones que consideran correctas para demandar servicios.
Asimismo los ciudadanos destacan la aceptación de organizaciones sociales y la poca confianza en la policía. También existe poca tolerancia de opiniones y es la única zona que tiene mayor convicción en que el Estado debe respetar los derechos humanos antes de juzgar a un posible delincuente.
La Tierra Caliente destacó por ser un escenario de violencia, con delitos como el secuestro y la extorsión. Ahí existe poca confianza en la policía y es la zona donde hay poca cultura de la denuncia, aunque es la zona con mayor participación electoral en Guerrero.
Se informó que este estudio presentado ante consejeros del IEPC, representantes del Instituto Nacional Electoral y del gobierno del estado, servirá para replantear objetivos y metas de instituciones políticas.