Proponen que polígonos del Parque El Veladero pasen a manos de Sedena

ACAPULCO, Gro., 11 de marzo de 2019.- Por unanimidad, los diputados de la 62 Legislatura aprobaron un exhorto al Ejecutivo federal para que el Parque Nacional “El Veladero” sea considerado como un asunto de seguridad nacional.

De acuerdo con un boletín, el exhorto pretende evitar que se continúe con el cambio de uso de suelo, las invasiones al territorio federal, venta de terrenos a terceras personas, además de regular la explotación de aguas de los manantiales y preservar el ecosistema y la calidad ambiental de Acapulco, incluyendo su bahía, que cada día se degrada de peligrosa manera.

La propuesta la hizo el diputado Ossiel Pacheco Salas  es dirigida a la titular de la Secretaría de la Función Pública, para que analice la viabilidad -sin desincorporar del régimen de dominio público de la Federación- de que se destine al servicio de la Secretaría de la Defensa Nacional el inmueble que considera los polígonos poniente y oriente, ambos con una superficie total de 3 mil 505.21 hectáreas al interior del citado parque de Acapulco.

El también presidente de la Comisión de Agua, Infraestructura y Recursos Hidráulicos refirió que el parque “El Veladero”, además de ser parte de la historia de México, es fundamental para preservar el ecosistema y mejorar la calidad ambiental de los habitantes del puerto.

Mencionó que durante años se han generado un sinnúmero de conflictos sociales y de gran afectación ecológica, derivados de la inobservancia del objetivo principal de la creación del parque en mención, ya que la invasión y apropiación ilegal de sus tierras ha sido algo que las autoridades no han sabido contener.

Por estos antecedentes, el legislador propuso que el Gobierno Federal otorgue en destino a la Sedena los polígonos poniente y oriente, ya que si no se actúa con responsabilidad y decisión, cada día que pase sin acción institucional contundente, abonará a una mayor degradación del ecosistema del parque y la consecuencia inmediata -ya vivida- podrían ser nuevas pérdidas de vidas por asentamientos humanos irregulares en zonas de alto riesgo.