Teléfono rojo
Cambio de Paradigma: Homeworking
El trabajo más productivo es el que sale de las manos de un hombre contento.
VictorPauchet (Cirujano Francés 1869-1923).
El confinamiento y/o distanciamiento social que ha venido a ser parte de nuestras vidas, debido a la pandemia, nos ha obligado a adaptarnos, aquellos que tienen la posibilidad de realizar sus actividades desde casa, empiezan a vivir una nueva realidad, el Homeworkingo en castellano, teletrabajo.
Y de pronto, las empresas se han dado cuenta que el sistema funciona. Sus empleados cumplen con sus metas a tiempo y tienen muchas ventajas colaterales. El gasto de la infraestructura (área laboral), consumo de energía eléctrica, corre por cuenta del empleado. El Homeworking, no es una novedad, desde hace más de una década, se consideraba que para 2020 el 29 % de los empleados trabajarían de esa manera. Un elemento vino a inclinar aún más la balanza, el COVID-19.
Actualmente, aún sin la pandemia más del 24% de las empresas han adoptado estilos de trabajo móviles, utilizando los diversos dispositivos disponibles para que sus empleados desempeñen actividades sin estar físicamente en una oficina.
Trabajar desde casa parece de inicio muy atractivo, nos imaginamos en pijama frente a la computadora, con toda la comodidad que nos ofrece nuestro hogar, evitando horas perdidas en el tráfico, estrés y los gastos que derivan de trasladarnos a la oficina y comer fuera de casa.
Sin embargo, hacer home office no es tan sencillo y no es para todos. Para que el trabajo en casa sea productivo y exitoso debe haber ciertas condiciones favorables, además el empleado requiere de competencias específicas.
En países como México la movilidad en zonas urbanas se ha convertido en un gran problema económico, ambiental y de seguridad. Tan sólo entre el DF y el área metropolitana se desplazan diariamente unos 34 millones de personas en vehículos particulares y transporte público.
Con más empleados trabajando en casa, sin necesidad de desplazarse, el tráfico, las emisiones contaminantes y el gasto en trasporte y gasolina se reducirían de manera importante.
De acuerdo con información de la firma Regus, 28% de los mexicanos emplean más de 45 minutos en llegar a su lugar de trabajo, eso quiere decir más de hora y media diaria invertida en desplazarse del hogar a la oficina. Para algunos mexicanos los tiempos pueden superar 4 horas de viaje diario. Trabajando desde casa recuperaríamos muchas horas invertidas en trayectos.
Uno de los grandes problemas para muchos empleados es el tradicional horario de 9 a 6 que en muchas ocasiones impide que las personas se ocupen de tareas importantes, como ir al médico, asistir a una junta en la escuela de los hijos, realizar un trámite.
Las generaciones más jóvenes son cada vez más demandantes en cuanto a flexibilidad de horarios, un factor que podría mejorar trabajando desde casa.
Una investigación reciente realizada por la Universidad de Brown a más de 13 mil empleados de NASDAQ encontró un incremento del desempeño de 12% a los empleados que hicieron home office, reportó la revista Forbes; además, los empleados dijeron sentirse más satisfechos.
Cada vez más estudios apoyan la idea de que trabajar desde casa dispara la productividad de los empleados.Uno de los sectores más vulnerables a la discriminación laboral son las mujeres, quienes asumen casi al 100% la responsabilidad de la crianza de los hijos, aunque esto implique tener menos oportunidades en el mercado de trabajo.Hacer home office podría ser una alternativa efectiva para que madres y padres de familia atendieran sus responsabilidades domésticas con mejores condiciones, compartiendo el cuidado y la educación de los hijos.
Sin embargo, existen las desventajas, la posibilidad de distracción es alta.
Lograr concentrarse y ser productivos ya es todo un reto en la oficina, que se supone es un lugar acondicionado para facilitar a las personas desempeñar un trabajo.
Tu casa no siempre es el mejor lugar para trabajar sobre todo si hay grandes distractores como la televisión, los amigos, tu pareja o tus hijos pequeños; trabajar en casa requiere disciplina y un espacio tranquilo que funcione como oficina. Un horario de 9 a 6 de lunes a viernes no es flexible para muchos, pero trabajar media hora en un proyecto y después lavar los platos puede ser una tentación peligrosa cuando se hace home office.
Para aprovechar la libertad al máximo es necesario establecer horarios y reglas para separar tu vida personal de tu vida laboral, de lo contrario terminarás trabajando a media noche: “al fin y al cabo estás en casa”. Un desorden en tus horarios podría traerte más desventajas que beneficios a largo plazo. Tiempo en familia ¿Es mejor tener mayor cantidad de tiempo o es preferible tener calidad de tiempo?
No tener que acudir a una oficina no quiere decir necesariamente que pasaremos más tiempo de calidad en familia.Estar en casa nos permite ocuparnos de otras actividades, pero la demanda del trabajo puede hacer que no tengamos tiempo de disfrutar a los hijos o a la pareja por atender pendientes. Una vez más la disciplina y la organización son clave.
Cuando estás en la oficina y algo falla con tu equipo de cómputo sólo tienes que llamar al encargado de soporte para obtener una solución, pero cuando trabajamos desde casa las fallas técnicas son nuestro problema y aunque la empresa ofrezca asistencia, perderemos mucho tiempo. En la vida laboral las relaciones humanas son de gran importancia, en ocasiones surgen problemas con un colega o el ambiente de la oficina es tenso.
Sin embargo, también hay una parte motivadora en el contacto humano en el trabajo, algo que, aunque lo tratamos de compensar con comunicación a través de redes sociales, siempre hará falta “el toque humano”. Recordemos que solamente Juntos Logramos Generar: Propuestas y Soluciones.
JLG.