Supervisan CAPASEG y Conagua avances de obras de saneamiento en Acapulco
Buscadores de tesoros acuden a las diferentes playas de este destino turístico con detectores de metales para localizar entre la arena objetos de valor.
Entre los objetos más encontrados hay monedas, anillos, cadenas de oro o plata. Sin embargo, también hallan piezas oxidadas, aluminio, fierro e incluso balas y casquillos percutidos.
El joven Andrew, de 24 años y originario de este municipio, comentó para Quadratín que hace esta actividad como un hobby y, principalmente, después de los periodos vacacionales.
“Luego de que los visitantes disfrutan de las playas, muchos ingresan al mar con aretes, anillos u otros objetos de valor, que terminan perdiendo y quedando enterrados en la franja de arena”, explicó.
La actividad consiste en caminar por la playa con el detector de metales. Dependiendo del sonido que emite el aparato, se puede identificar la presencia de objetos metálicos. Para facilitar la búsqueda, también llevan una pala metálica con orificios para cernir la arena. Andrew señaló que los detectores de metales varían en precio, desde los 2 mil pesos hasta los 40 o 50 mil pesos. Además, mencionó que no solo se lleva a cabo esta actividad en las playas, sino también en construcciones o casas viejas