Reflexionan en Cumbre de Quadratín sobre el poder y los medios
ACAPULCO, Gro., 30 de mayo de 2018.- Expertos que participaron en una investigación publicada en la revista Fire Safety Journal refutaron la versión sobre que los 43 normalistas de Ayotzinapa fueron incinerados en el basurero de Cocula en 2014, como defendió el ex procurador Jesús Murillo Karam.
De acuerdo con Reforma, el nuevo estudio científico sobre hogueras a cielo abierto, expuso que para incinerar a los estudiantes hasta borrar su ADN se habrían necesitado aproximadamente 15 mil 50 kilógramos de madera, si cada joven pesara 70 kilos.
“En condiciones ideales -cuerpos pequeños y alimentación continua de combustible- es necesario un mínimo de cinco veces el peso del cuerpo en madera seca para lograr la destrucción casi completa de toda la materia orgánica”, refirió.
En la investigación titulada Estudio experimental sobre los requisitos de combustible para la degradación térmica de cuerpos por medio de la cremación de pira abierta, se expresó también que la presencia de múltiples cuerpos apaga el fuego, en lugar de favorecerlo.
Los expertos, coordinados por Luis Yermán y entre los que se encuentra el peruano José Torero, llevaron a cabo con ayuda de la Universidad de Queensland, en Australia, seis diferentes piras, con uno o hasta cuatro cerdos en cada una de ellas.
“La relación entre el nivel de destrucción de un cuerpo y la eficiencia de quemado, la intensidad y la duración de los posibles incendios debe demostrarse para inferir la validez de una hipótesis de cremación”, indicó.
“Un ejemplo de alto perfil donde esta correlación se convirtió en clave para establecer la validez de una hipótesis forense se relaciona con lo que se ha denominado la ‘verdad histórica’ en el caso de los 43 estudiantes desaparecidos en Ayotzinapa”, sostuvo el estudio, en referencia al caso Iguala.