Termina en Acapulco reparación de socavón en bulevar de Las Naciones
ACAPULCO, Gro., 3 de septiembre de 2019.- Integrantes de la organización Familias de Acapulco en Busca de sus Desaparecidos reprocharon la falta de sensibilización y recursos públicos ante denuncias de desaparición forzada de algún familiar.
Durante el primer Conversatorio de Prevención y Qué Hacer Ante la Desaparición de Algún Familiar, que se desarrolló en el auditorio Héctor Dávalos, de la Universidad Americana de Acapulco, participaron representantes de dependencias federales y estatales encargadas del seguimiento a denuncias de personas desaparecidas en Guerrero.
Los funcionarios reconocieron la limitación financiera, falta de personal y restricciones para desempeñar sus actividades.
Por su parte, la presidenta de la organización, Emma Mora Liberato informó que hay más de tres mil personas reportadas como desaparecidas en este puerto desde 2011 y, añadió que la agrupación con tres años de su conformación, cuenta ahora con 231 familias agremiadas.
Dijo que han logrado ayudar en el trámite para la identificación y entrega de restos óseos de 53 personas a sus familiares de otros colectivos.
Al final del conversatorio convocado por la organización, la activista señaló que los familiares quieren resultados.
“Hay más de tres mil familias que estamos sufriendo esa indolencia, ese dolor, ese sufrimiento de que cada vez que nos vamos a dormir de no saber qué está pasando con nuestro familiar. Hemos logrado localizar a 23 personas con vida, porque nos hemos movido en menos de 24 horas y hemos trabajado con otros estados”, expuso Mora Liberato.
Acudieron la fiscal Especializada en Materia de Desaparición Forzada y Búsqueda de Personas Desaparecidas, Eloína Sánchez Zamora; el comisionado Ejecutivo Estatal de Atención a Víctimas, Luis Camacho Mancilla; la delegada de la Comisión de los Derechos Humanos de Guerrero, Fanny Ruth Lara Figueroa; y el subdirector de la Unidad de Atención a las Organizaciones Sociales del gobierno federal, Alfonso Silva Sánchez.
Durante su llegada, cada asistente recibió una rosa blanca con un listón amarillo atado, en el cual estaba escrito el nombre de una persona reportada como desaparecida.