Satiricosas/Manú Dornbierer

Cumpleaños de un gran hombre

Este domingo 27 de octubre de 2019 es el cumpleaños de uno de los grandes hombres de esta época. Cumplirá 74 años en una cárcel sentenciado “por los delitos de corrupción y lavado de dinero”. Su celda, en Curitiba, capital del estado de Paraná, tiene 15 metros cuadrados y es un poco mejor que la de prisioneros comunes. Se llama Luiz Inácio Da Silva y le dicen Lula.

Nació en 1945, el año en que terminó la Segunda Guerra Mundial.

Fue el séptimo de 8 hijos de Aristides Inácio da Silva y Eurídice Ferreira de Melo. Dos semanas después de su nacimiento, su progenitor se mudó de ciudad y hasta 1952 la familia volvió a reunirse. Lula tuvo dos esposas: María de Lurdes da Silva (1969–1971) y Marisa Letícia Lula da Silva (1974–2017), y cinco hijos.

Para sobrevivir, de niño fue bolero y vendedor callejero de naranjas. A los 16 años tomó un curso de tornero mecánico para trabajar en la Fábrica de Tornillos Marte, donde obtuvo una beca para estudiar un curso de metalurgia de tres años. Tras el golpe militar de 1964, anduvo de fábrica en fábrica hasta que en 1966 entró a las Industrias Villares, una de las principales metalúrgicas del país.

En 1975 fue elegido presidente del sindicato de Metalúrgicos. El 13 de marzo de 1979 convocó a una huelga general y juntó en un estadio de fútbol a 80 mil metalúrgicos. Para evitar ataques contra los manifestantes tuvo que intervenir la Iglesia. El 10 de febrero de 1980 fundó el Partido de los Trabajadores junto a otros sindicalistas, intelectuales, políticos, representantes de movimientos sociales, siendo elegido como su primer presidente.

En 1982, logró implantar el PT, Partido de los Trabajadores, con más de 400 mil militantes.

En 1986, en alianza de movimientos de izquierda, sindicalistas, intelectuales y activistas religiosos, fue electo diputado federal.

En 1989 el PT lo hizo su candidato a la primera magistratura del país, después de 29 años sin elecciones. Obtuvo más de 31 millones en la segunda vuelta, pero no fue suficiente para vencer a Fernando Collor de Melo. En 1994 volvió a presentarse a las elecciones y, a pesar de su primer lugar en las encuestas, fue derrotado por Fernando Henrique Cardoso. Volvió a intentarlo en 1998, y lo mismo. Devino coordinador del Instituto Ciudadanía, un centro de estudios y formulación de propuestas para políticas públicas.

En 1994 y 1998 Lula quiso ser presidente de su país, pero tampoco lo dejaron.

Por fin, el día de su cumpleaños, el 27 de octubre de 2002, Lula fue elegido presidente de Brasil, derrotando al delfín de Cardoso. Consiguió la victoria entre el delirio de sus seguidores que salieron a celebrarlo en Sao Paulo y otras ciudades, Lula proclamó la llegada de una “nueva era” a Brasil y convocó “a todos los hombres y mujeres brasileños, a empresarios, sindicalistas e intelectuales, para construir una sociedad más justa, fraterna y solidaria”. El 1 de enero de 2003 recibió la banda presidencial (cuatro años con posibilidad de reelección).

Ejerció la presidencia de Brasil del 1 de enero 2003 al 31 de diciembre de 2010, porque fue candidato a la presidencia en las elecciones del 1 de octubre de 2006 obtuvo un 48.61 por ciento de los votos contra un 41.64 del socialdemócrata Geraldo Alckmin, por lo que se debió realizar una segunda vuelta. En la segunda triunfó con un amplio margen, obteniendo el 60.82 por ciento de los votos populares, convirtiéndose en el presidente de Brasil hasta el año 2011 en que lo sucedió Dilma Rousseff.

Lula colocó a su país como una potencia mundial. Pudo haberse reelegido por segunda vez, pero fue acusado de “corrupción” por la aberrante Derecha brasileña, de hecho “por atacar las causas subyacentes de la pobreza en Brasil”. Esa Derecha que hoy impuso al grotesco Bolsonaro que está quemando la Amazonia, “el pulmón del mundo”.

Lula es el hombre político de mayor envergadura condenado por acusaciones relacionadas con la gigantesca empresa energética Petrobras, controlada por el Estado. Su sucesora, Rousseff, fue reelecta en 2014, pero también terminó envuelta en el escándalo de Petrobras.

El diario francés Le Monde y el español El País lo nombraron «personalidad del año 2009». La revista Time lo eligió como el líder más influyente. “Decenas de millones de sus compatriotas se beneficiaron de los programas sociales de su gobierno”, según dijo el NY Times.

El 17 de junio de 2003 obtuvo el Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional en reconocimiento a “una trayectoria política y personal en defensa de los trabajadores y de la lucha contra la pobreza, la desigualdad y la corrupción que tanto han hecho sufrir a los desheredados de su país y del mundo entero”.

Como Jefe de Estado de Brasil, impulsó reformas que trasformaron social y económicamente a su país convirtiéndolo en la octava economía mundial. Más de 20 millones de personas salieron de la línea de pobreza extrema.

FELIZ CUMPLEAÑOS DE 2019, LULA INACIO DA SILVA.

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