El agua, un derecho del pueblo
Ya llenaron las listas de solicitantes.
Y con ellas dieron imagen de éxito.
Pero ahora el reto es justificar la existencia de tanto aspirante a cualquier plaza de juez, magistrado o ministro en el nuevo aparato del Poder Judicial.
Oficialmente hay 49 mil 398 inscritos en los tres poderes: Presidencia de la República, Senado y Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Los comités de evaluación respectivos revisan nombres, cotejan documentos y analizan datos curriculares para ver si corresponden
Pero en muchísimos casos no coinciden por distintas razones: no llenaron bien los formatos, simplemente mandaron sus nombres, no remitieron los títulos respectivos y menos acreditaron su experiencia jurídica.
La inmensa mayoría topa con ese déficit y ¿cómo darles una plaza de juzgadores si no demuestran destreza en el manejo de procesos penales, laborales, civiles, mercantiles, familiares y demás?
En la criba veremos reducir mucho la cifra de 49 mil 398, repartidos en los siguientes cajones: 18 mil 447 en el Ejecutivo, 27 mil 146 en el Legislativo y tres mil 805 en el Judicial.
EN LAS 3 VENTANILLAS
Hay otra circunstancia:
Por dudas, afición o para ser tomados en cuenta, muchos contendientes acudieron a los tres Poderes de la Unión y quizá eso les reste posibilidades.
Un caso:
El panista Roberto Gil Zuarth, a quien se le ha puesto lupa por haberse desempeñado como secretario particular de Felipe Calderón y presidente del Senado de la República, recurrió a las tres ventanillas.
Quiere ser ministro de la Corte pero, ¿lo colocarán al lado de las tres incondicionales del gobierno y activistas de la 4t Lenia Batres, Jasmín Esquivel y Loretta Ortiz?
Sería su contrapeso y, no olvidemos, en su cara fustigó a Arturo Zaldívar por renunciar a la Corte para irse “matraquero de la 4t”.
Por lo pronto a un desechado en la lista para diputado federal por Morena –llamémosle Héctor–ya recibió su título de abogado con la rapidez explorada por el fiscal Ulises Lara.
UN VIAJERO FRECUENTE
Un funcionario de la 4t tiene la vista de muchos.
Numerosas solicitudes de información han encendido las alertas en el gobierno capitalino de Clara Brugada por un viajero frecuente y gran aficionado a los deportes.
Es el secretario de la Contraloría de la Ciudad de México, Juan José Serrano Mendoza, quien viaja a Estados Unidos y ha sido captado en partidos de futbol americano.
Eso dicen los datos enviados a la UIF de Pablo Gómez, el SAT de Antonio Dagnino, Hacienda de Rogelio Ramírez de la O, el fiscal Alejandro Gertz y muchos otros funcionarios.
Quieren saber si Serrano Mendoza usó recursos públicos cuando viajó, por ejemplo, a Miami al partido Raiders-Dolphins en el Hard Rock Stadium y lo disfrutó desde el palco de Gustavo Gutiérrez Galindo, fundador y director de Broxel?
Los interesados hablan, para mayores pistas y posible conflicto de intereses, de contratos con el Gobierno de la Ciudad de México en los cuales habría intervenido el personaje de la Secretaría de la Controlaría.
Los funcionarios de la Ciudad y de la federación sabrán qué destino dar a estas solicitudes de información o si las toman como denuncias formales para actuar.