Corrupción neoliberal
Las vencidas tienen muchos protagonistas.
Se dan en todos los niveles: de los estados contra la federación, del presidente contra su propio gobierno federal, y de los estados por vía libre a falta de estrategia.
A la disección:
Ayer dimos cuenta aquí de la falta de un plan integral nacional, por lo cual los secretarios de Salud se fueron huérfanos de idea y apoyo.
Porque no puede llamarse plan a la orden de dar por muertos de influenza estacionaria a infectados con todos los síntomas de Covid 19.
Pero tampoco el hecho destacado internacionalmente de un presidente en abrazos, saludos y besos en todos lados mientras las autoridades sanitarias promueve el distanciamiento social.
Susana Distancia, llama la Secretaría de Salud (SSA) al personaje publicitario para contener los contagios aquí, allá y acullá.
Pero Susana Distancia ya está derrotada desde Palacio Nacional: hay que salir a convivir, comprar, consumir para evitar la caída de una economía en pleno despeñadero.
VACÍO DE DECISIONES
El país va por otro rumbo.
Lo señalamos ayer: el 4 de marzo los secretarios de Salud de los estados pidieron políticas de Estado en la propia SSA y no la recibieron.
Por ello la dispersión.
En el norte varios estados -Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila- crearon sus propias estrategias para el coronavirus en la frontera.
En otros lados, los alcaldes crearon su propia red de acción: Xavier Nava (San Luis Potosí), Miguel Treviño (San Pedro Garza García), Luis Bernardo Garza (Querétaro), Héctor López (León), Leoncio Morán (Colima), César Garza (Apodaca), Renán Barrera (Mérida), Manolo Jiménez (Saltillo).
María Teresa Jiménez (Aguascalientes), Maki Esther Ortiz (Reynosa), Gabvriea Gamboa (Metepec), María Campos (Chihuahua)…
Ellos tienen su estrategia.
Aparte, el gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo, y la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbvaum, hacen la suya para la zona metropolitana.
Pero el más radical es el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, quien de plano decidió distanciarse del “vacío de decisiones que hoy estamos viviendo” con el gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Hará pruebas multitudinarias y, lo más severo, decidió cerrar los aeropuertos de Guadalajara y Puerto Vallarta -tercero y cuarto a nivel nacional- provenientes de lugares con cercos sanitarios.
Le acarreará consecuencias, como mostrar estadísticas superiores a las nacionales de la federación para cada lugar.
Pero no le importa: “No me importa estar compitiendo por las estadísticas de popularidad”.
¡Zaz!
Todo por falta de estrategia nacional.
ACUERDO DE GUELATAO
Pasó desapercibido:
El alcalde de Guelatao, Federico Hernández, se quejó porque no llegan al municipio los recursos federales etiquetados.
El tema pasó a revisión y, quedó constancia, el gobierno de Alejandro Murat no se ha quedado con ningún centavo.
Entonces el problema está en instancias federales y por ello cambiará la estrategia para entregar recursos a los ayuntamientos.
Más claro: Si a las asociaciones de padres de familia se les da de manera directa, lo mismo debe hacerse con los municipios.
Prometió un “plan piloto” y si da resultado, se aplicará nacionalmente.